Cualquier persona puede contraer neumonía, pero algunas personas tienen un riesgo más alto que los demás. Los factores de riesgo (que aumentan sus posibilidades de contraer neumonía) incluyen los siguientes:
- Consumo de cigarrillos
- Infección viral respiratoria reciente; un resfriado, laringitis, influenza, etc.
- Dificultad para tragar (debido a un derrame cerebral, demencia, enfermedad de Parkinson u otras condiciones neurológicas)
- Enfermedad pulmonar crónica como la EPOC, la bronquiectasia o la fibrosis quística
- Parálisis cerebral
- Otras enfermedades graves, como enfermedades del corazón, cirrosis hepática o diabetes
- Vivir en un centro de enfermería
- Alteración de la conciencia (pérdida de la función cerebral debido a demencia, derrame cerebral u otras condiciones neurológicas)
- Cirugía reciente o traumatismo
- Tener un sistema inmunológico debilitado debido a una enfermedad, ciertos medicamentos y trastornos autoinmunes
La neumonía tiende a ser más grave para los bebés y los niños pequeños, los adultos mayores (personas de 65 años o más), las personas que tienen otros problemas de salud crónicos y las personas que tienen un sistema inmunológico débil, como resultado de enfermedades o de otros factores.
Cualquier persona puede contraer cáncer de pulmón. Hay varios factores que pueden hacer que las células de los pulmones cambien (muten). La causa más frecuente de que las células de los pulmones cambien es la exposición a las sustancias peligrosas que respiramos. Aun si uno estuvo expuesto a estas sustancias hace muchos años, todavía está en riesgo de contraer cáncer de pulmón. Dígale a su médico si en su familia hay antecedentes de cáncer de pulmón o si usted ha estado expuesto a alguno de estos factores de riesgo.
- Fumar
- Radón
- Sustancias químicas peligrosas
- Contaminación por partículas
A veces, no existen factores de riesgo ni una causa conocidos que expliquen el cáncer de pulmón de una persona.