En este artículo
- ¿Cuándo debo empacar mi maleta para el hospital o centro de nacimiento?
- Artículos esenciales para la mamá
- Qué empacar para el parto
- Qué empacar si vas a tener un parto por cesárea
- Qué empacar para la persona que te va a acompañar durante el parto
- Qué empacar para después del parto
- Lo esencial a empacar para tu bebé
- Lo que no se debe llevar al hospital
- Consejos de otras mamás sobre qué llevar al hospital
¿Cuándo debo empacar mi maleta para el hospital o centro de nacimiento?
Es buena idea preparar tu maleta alrededor de la semana 36 del embarazo, en caso de que des a luz un poco antes de la fecha prevista. Conforme se acerque la fecha, podrías dejar tu bolsa o maleta cerca de la puerta, o incluso en tu auto.Aunque tengas una cesárea programada, es bueno tener lista tu maleta porque tu parto podría empezar antes de la fecha de la cesárea.
Artículos esenciales para la mamá
- Tu documento de identidad, tarjeta del seguro y el nombre y número telefónico del pediatra de tu bebé. Verifica con antelación llamando al hospital o centro de nacimiento, qué papeles tendrás que llevar. Pregúntales si es necesario traer copias de tu historial médico (si vives lejos del hospital, por ejemplo, quizás sea conveniente tener a mano todo tu historial prenatal, en el caso de que lo necesitaran).
- Tu plan de nacimiento, si has escrito uno. Incluye copias adicionales para todas las personas de tu equipo médico.
- Artículos de aseo. Empaca algunos objetos de uso personal como cepillo y pasta de dientes, barra hidratante para labios, desodorante, un cepillo de pelo o peine, maquillaje (si piensas usarlo) , y pasadores y cintas para el cabello. Los hospitales suelen proporcionar champú, jabón y loción, pero quizás prefieras llevar los tuyos.
Lleva tus cremas y artículos de aseo en botellitas pequeñas, ya que quizás no haya mucho espacio para organizarlos en tu habitación ni en el baño del hospital. Una bolsa de tocador para viaje, de esas que se pueden colgar, es muy conveniente.
- Tus lentes, si los usas. Incluso si usas lentes de contacto, es posible que prefieras usar tus lentes o gafas en algún momento de estadía en el hospital o centro de nacimiento. Si optas por las lentes de contacto, no olvides la solución para limpiarlas y el estuche donde guardarlas. Nota: si te van a hacer una cesárea, te pedirán que te quites los lentes de contacto antes de la cirugía.
- Una bata, un camisón o dos, pantuflas y medias (calcetines). Los hospitales y centros de nacimiento ofrecen camisones y medias, pero muchas mujeres prefieren utilizar su propia ropa. Elige algo suelto y cómodo. Un camisón con mangas cortas es ideal para que te puedan tomar la presión arterial fácilmente.
Algunas mamás invierten en camisones diseñados especialmente para el parto, otras prefieren una camiseta larga y cómoda. Las pantuflas y bata son prácticas para caminar durante las primeras etapas del parto. Si te traes tu propia ropa, recuerda que se podría manchar de sangre y otros fluidos.
- Teléfono móvil y cargador. Es buena idea incluir una extensión eléctrica, por si no hay una toma de corriente cerca de tu cama.
- Un diario o cuaderno y una pluma o bolígrafo. No solo te permitirá registrar tus pensamientos y otras cosas que quieras recordar, sino que también podrás anotar información sobre las comidas de tu bebé, preguntas para tu médico, recomendaciones del pediatra, y más. (Estos apuntes serán también un bonito recordatorio del parto). Algunas mamás llevan consigo un libro del bebé donde pueden escribir inmediatamente estos detalles.
- Cualquier cosa que te pueda ayudar a relajarte. Aquí tienes algunas ideas: tu propia almohada (usa una funda estampada o de colores vivos para que no se confunda con las del hospital), una foto de alguien o algo que amas, o de un santo de quien seas devota, aceites o lociones para masajes (asegúrate de que el hospital lo permita) y cualquier otra cosa que te calme.
- Material para la colección de la sangre del cordón umbilical, si planeas conservar o donar la sangre del cordón umbilical de tu bebé (lee con antelación los documentos y formularios del kit).
Qué empacar para el parto
- Una pelota de ejercicio (y una bomba para inflarla), si piensas usarla. Quizás las tengan en el hospital o centro de nacimiento, pero verifica de antemano que sea del tamaño adecuado para ti. Aunque no quepa en tu maleta del hospital, valdrá la pena cargarla si es algo que te ayuda durante las contracciones.
- Libros, revistas o una tableta para mirar películas si te van a inducir el parto, porque en ese caso el parto podría tardar en comenzar.
- Loción o aceite para masajes, si piensas que te gustaría recibir un masaje durante el parto.
- Música. Trae tu lista de canciones favoritas y un altavoz o bocina portátil.
- Bebidas. El hospital o centro de nacimiento te proporcionará agua y talvez también algún jugo, pero quizás quieras traer tus bebidas favoritas, como algún jugo especial, gaseosa, bebida deportiva o té. Todos son líquidos transparentes que normalmente se pueden beber durante un parto sin complicaciones, pero pregúntale antes a tu médico para estar segura.
Si te van a hacer una cesárea programada y no tuviste complicaciones durante el embarazo, es posible que puedas seguir bebiendo líquidos transparentes hasta dos horas antes de que te apliquen la anestesia, pero las pautas de los hospitales varían, o sea que confírmalo antes con tu médico.
- Bocados o comidas ligeras. Si tienes un embarazo normal y el riesgo de que tengas complicaciones de parto es bajo, quizás puedas comer algo ligero en la fase inicial del parto. Pero te alertamos que las normas son diferentes en cada hospital (algunos no te permiten comer cuando estás de parto) o sea que pregunta antes de merendar.
Si te harán una cesárea programada, pregúntale a tu médico en qué momento tienes que dejar de comer. Es posible que tengas que ayunar de seis a ocho horas antes de la cirugía.
Qué empacar si vas a tener un parto por cesárea
Si te van a realizar una cesárea, es buena idea incluir también estas cosas en tu maleta:- Ropa interior suelta, que no comprima la incisión de la cesárea. Busca calzones o bragas de algodón suave y cintura alta. Compra una talla que te sirva después del parto (después de dar a luz, lucirás como de 6 meses de embarazo).
- Ropa cómoda y suelta que no roce la cicatriz. Si no quieres usar la bata del hospital durante el periodo de recuperación, trae ropa cómoda, como pantalones anchos de cintura alta o un vestido de tela ligera.
- Una faja de compresión. Ayudará a sujetarlo todo en su lugar y proteger el área de la incisión. También te ayudará a moverte con más facilidad, reducirá la hinchazón y servirá de soporte para los músculos de tu espalda. Muchos hospitales las proporcionan, pero si el tuyo no las ofrece (o quieres un tipo específico de faja) podrás llevar la tuya propia.
- Un laxante o ablandador de heces. El estreñimiento es una molestia común después de la cesárea. En el hospital te pueden dar algo para tratarlo, pero también puedes traer de casa algo que sabes que funciona para ti (por supuesto, habla con tu médico o partera antes de tomar cualquier medicamento o remedio, aunque sea natural).
Qué empacar para la persona que te va a acompañar durante el parto
- Una videocámara (si no vas a usar tu teléfono). ¡Alguien tiene que documentar el gran momento! No todos los hospitales permiten filmar el nacimiento propiamente dicho, pero, por lo general, no hay reglamentaciones en contra de la filmación durante el parto o después del nacimiento. Si piensas usar tu teléfono para tomar fotos y filmar, asegúrate de que esté completamente cargado y no olvides el cargador. Es buena idea llevar una batería portátil, ya que no todos los hospitales permiten usar las tomas de corriente de la sala de partos o quirófano.
- Artículos de aseo
- Una muda de ropa y zapatos cómodos
- Algo para comer y beber
- Libros y revistas
- Un teléfono móvil para mantener informados a los familiares y amigos. Asegúrate de que estén incluidos los números telefónicos de todas las personas a quienes deseas contactar (puedes crear un grupo para facilitar la comunicación). También hay aplicaciones que puedes bajar en tu teléfono para cronometrar las contracciones, y juegos y podcasts para entretenerte. Y no olvides el cargador.
- Dinero (o tarjeta de crédito) para el estacionamiento y monedas para las máquinas que venden comida, bebida, etc.
- Un traje de baño para tu pareja o acompañante por si quieres darte una ducha o un baño durante el parto. Así podrá meterse contigo para darte un masaje en la espalda o sostenerte.
- Un ventilador portátil pequeño o un rociador de agua para refrescarte durante el parto.
- Una almohada y una cobija pequeña, si prefieren usar las suyas propias en lugar de las que ofrece el hospital. Es importante que tu pareja también descanse cuando pueda.
- Medicamentos con receta y calmantes para el dolor, para aliviar posibles dolores de cabeza o de espalda al quedarse dormido en un sillón o camilla.
Qué empacar para después del parto
- Un camisón limpio , si prefieres ponerte el tuyo propio. Si vas a dar el pecho, es mejor elegir un modelo que sirva para amamantar (que se abra por delante).
- Uno o dos vestidos cómodos. Algunas mamás prefieren quitarse el camisón del hospital durante su estadía, sobre todo si van a recibir visitas.
- ¡Algo para comer! Después de tantas horas de trabajo de parto, quizás tengas bastante hambre y no quieras comer solamente la comida del hospital. Por eso es recomendable llevar algunas de tus meriendas favoritas. Procura que sean saludables para ayudarte a reponer fuerzas (fruta, galletas saladas, frutos secos, yogur o cualquier otra cosa que te guste). Si tuviste una cesárea, probablemente te dejarán empezar a beber líquidos una hora después, pero quizás tengas que esperar unas ocho horas antes de comer alimentos sólidos (esto dependerá de los calmantes o narcóticos que necesites y de si tienes náuseas).
- Mascarilla para dormir y tapones para los oídos. Te ayudarán a dormir si en tu cuarto hay demasiada luz o ruido.
- Un brasier para amamantar o un brasier normal que sea bien cómodo. Tanto si decides amamantar como si no, tus senos probablemente estarán hinchados y adoloridos cuando te baje la leche. Esto puede suceder en cualquier momento durante los primeros días después del parto. Una vez que te baje la leche, las almohadillas protectoras para los senos serán útiles para absorber la leche que se salga y proteger tu ropa.
- Ropa interior de maternidad. A algunas mujeres les gusta la ropa interior desechable que dan en el hospital, a otras no. Puedes llevarte prendas cómodas y de algodón, que nunca estarán de más.
- Tus toallas higiénicas favoritas. Después del parto sangrarás bastante. El hospital provee toallas higiénicas, pero si tienes una marca o estilo de toallas femeninas (compresas) preferidas, llévate unas cuantas para sentirte lo más cómoda posible. Asegúrate de que sean muy absorbentes y de tener bastantes en casa para cuando regreses.
- Un libro o aplicación en tu teléfono sobre el cuidado del recién nacido. Es posible que el hospital te dé un libro o algunos folletos con información. Además, las enfermeras estarán allí para responder tus preguntas, y enseñarte cómo cambiar, sujetar, amamantar y bañar a tu recién nacido si necesitas ayuda. Podrías llevarte tu computadora portátil para consultar la información de BabyCenter sobre cómo cuidar a un bebé recién nacido. O descarga nuestra app gratuita para el cuidado de tu bebé.
- Una almohada para amamantar. Una almohada bien diseñada ofrece el soporte ideal para que puedas amamantar cómodamente a tu bebé.
- Fotos de tus otros niños. Cuando vengan a visitarte verán que no te has olvidado de ellos.
- Regalos para tus hijos mayores. Algunos padres llevan regalos que el nuevo bebé les "trajo" a sus hermanos mayores. Podría ser un pequeño juguete o una camiseta que diga algo como hermanito mayor.
- Una carpeta de papel o un sobre grande. Te servirá para guardar las instrucciones que te den en el hospital (sobre el cuidado posparto, del recién nacido, lactancia, etc.), recibos, copias de tu historial médico y otros documentos.
- Una muda de ropa para volver a casa. Aunque resulte difícil de creer, probablemente todavía te veas como de unos 6 meses de embarazo, así que lleva ropa holgada y un par de zapatos cómodos y sin tacón.
- Una bolsa para la ropa sucia. Al llegar a casa, podrás vaciarla directamente en la lavadora (o pedirle a alguien que lo haga por ti).
- Un extractor de leche, si piensas usarlo. Los hospitales tienen bomba extractoras, pero es bueno que tengas la tuya propia si vas a consultar a una asesora de lactancia.
- Una bolsa o recipiente térmico. Úsala para guardar la leche que te extraigas y también las bebidas o alimentos perecederos que te hayas traído.
Lo esencial a empacar para tu bebé
- Un asiento de bebé para el auto, debidamente instalado. ¡No puedes llevar en auto al bebé si no lo tienes! Instala el asiento correctamente unas semanas antes de la fecha de parto e infórmate de cómo colocar a tu recién nacido en él correctamente.
- Cortaúñas para bebés, lima de esmeril o mitones (manoplas). Es posible que en el hospital le pongan un camisón a tu bebé con mangas largas y mitones acoplados, para evitar que se rasguñe. Pero también puedes traer una lima o cortaúñas de bebé para cortar esas diminutas uñitas, o traer guantes o manoplas infantiles de casa. La creencia de que los bebés se quedarán ciegos si se les corta las uñas con tijeras es uno de los muchos mitos que hay en nuestra cultura.
- Un trajecito especial para las primeras fotos. Muchos hospitales y centros de nacimiento ofrecen un servicio de retratos de recién nacidos. Quizás quieras llevar una ropita especial para la sesión de fotos.
- Ropa para el hospital. Tu bebé podrá llevar simplemente los pijamas o camisones que le pongan en el hospital, pero si quieres, le puedes poner las ropitas que te traigas de casa.
- Una muda de ropa para volver a casa. Los pijamas o mamelucos de una pieza son abrigados y fáciles de poner. Si le pones otro tipo de ropa, lleva medias o zapatitos blandos para sus pies. Lleva también un gorrito para cubrirle la cabeza si hace fresco. Si es invierno y hace mucho frío, lleva también unos overoles de vellón y manoplas. Las piernas de su atuendo deben ir separadas para poder pasar la correa del asiento del auto (es decir, no te lleves un pijamita-manta que es como una bolsa entera).
- Toallitas o pañales de tela para protegerte la ropa y limpiarle si tu bebé regurgita mientras le sacas el aire.
- Una manta o cobija de bebé. El hospital te proporcionará mantitas para envolver a tu bebé mientras estés allí, pero es buena idea llevarte una para taparlo cuando lo pongas en el asiento del auto. Si hace frío, llévate una manta más gruesa.
Lo que no se debe llevar al hospital
- Joyas
- Mucho dinero en efectivo, y otros objetos de valor
- Medicinas, incluyendo tus vitaminas o suplementos. Cualquier medicamento que te traigas tendrá que ser aprobado por la farmacia del hospital (y este proceso puede tardar bastante). Pregúntale a tu médico si en el hospital te darán todas las medicinas que necesitas o si debes traértelas de casa sometiéndolas antes al proceso de aprobación.
- Pañales y toallitas húmedas. El hospital te dará los que necesites mientras estés allí, o sea que deja los tuyos en la casa.
- Biberones y tetinas, si piensas darle el biberón a tu bebé. El hospital también los tendrá.
- Velas. Ni los hospitales ni los centros de nacimiento permiten encender velas. Pero quizás sí puedas usar un difusor de aceites esenciales. Pregunta en el hospital.
Consejos de otras mamás sobre qué llevar al hospital
"Llévate una toalla vieja y una bolsa de basura para el viaje en auto al hospital. Pon la bolsa sobre tu asiento y la toalla encima. Así, si se te rompe la fuente en el camino al hospital, no tendrás que preocuparte de limpiar el asiento del auto al volver a casa.""Llévate tus lentes de contacto, además de los lentes regulares. Durante mi primer parto me llevé solo los lentes, pero hacía mucho calor y los lentes se empañaban. No podía ver nada. Fue muy frustrante."
"Me llevé más de una muda de ropa. Con la subida y bajada de hormonas sudé mucho, y como tuve que pasar varios días en el hospital, me hizo sentir mejor poder cambiarme."
"Ropa interior desechable. La que te dan en el hospital no es muy cómoda."
"El Libro de recuerdos del bebé. Le van a tomar las huellas de los pies a tu recién nacido para el certificado de nacimiento, y puedes aprovechar para que te las pongan en el libro."
"Crema para aliviar el dolor de los pezones. Mis pezones se agrietaron y tuve que mandar a una amiga a que me comprara la crema."
"Un chupón. Mi hija quería estar chupando constantemente y la segunda noche en el hospital le di un chupón. Eso salvó mis pezones porque les dio un descanso. Ya sé que algunos expertos aconsejan no dar un chupón hasta que el bebé tenga varias semanas y la lactancia esté bien establecida, pero en mi caso fue necesario. Además, no le creó a mi hija ningún problema y la alimenté exclusivamente con leche materna hasta que cumplió 9 meses."
"Una caja de bombones para las enfermeras. Trabajan muy duro para ayudarte y si les llevas un detalle les harás sentir muy bien."
"Una diadema o un adornito para el pelo y algo para los labios, un brillito o algo así. ¡La belleza ante todo, amigas, porque saldrás en todas las fotos!"
"Trae un cortaúñas de bebé o una lima de uñas. En el hospital no los tenían y mi hijo se rasguñó toda su carita antes de cumplir sus primeras 12 horas de vida."
"Llévate un par de chanclas o sandalias baratas de plástico para ducharte. A mí me daba asco pisar descalza el piso del baño del hospital."
"Trae un vaso o botella térmica grande. Con mi primer bebé solo me dieron unos vasitos de plástico pequeños y una jarra de agua a la temperatura ambiente. ¡Me moría de sed y calor cada vez que amamantaba a mi bebé!"
"La ropa que mejor me funcionó al llegar a casa fueron unos overoles como de granjero (mono o jumpsuit). Con mis cuatro hijos tuve cesáreas programadas."
"Trae barritas de granola, ciruelas secas o cualquier cosa que tenga mucha fibra porque tendrás mucho hambre después. Come toda la fibra que puedas (y poca grasa) unos tres o cuatro días antes de la cesárea, ya que será doloroso cuando tengas que ir al baño y si comes mucha fibra harás menos esfuerzo y tendrás menos dolor."
"Yo usé la ropa interior, las toallas sanitarias y las medias que me dieron en el hospital. Tampoco me traje mi propio camisón ni bata, sino que simplemente me puse un segundo camisón por encima como si fuera una bata. Como la mayoría de las mujeres, sangré mucho y no quise manchar mi ropa interior ni camisones. Preferí guardarlos para cuando regresara a casa."
"Mi cuñada me regaló un par de pantalones anchos de seda con una cuerdita en la cintura. Les hizo un corte delante en forma de U para que no me rozaran la incisión. Me sentí divina en mis pijamas de seda y los usé mucho en casa después también. Tráete también perfume, maquillaje, gel de baño y todo lo que normalmente te hace sentir bella. Todo esto te ayudará porque una no se siente muy guapa después del parto."
"Encarga los calmantes para el dolor en la farmacia y pídele a otra persona que los recoja por ti antes de salir del hospital. Cometí el error de esperar hasta después de salir, y no aguantaba de tanto dolor."
Referencias
Park Nicollet. Undated. What to bring to the hospital. www.parknicollet.com/methodist/birthcenter/preparing/whatToBring.cfmUniversity of Iowa Health Care. Undated. What to bring to the hospital. www.uihealthcare.com/depts/maternitycenter/labor/whattobring.html