Conozca más sobre La Alianza de Participación Comunitaria (CEAL, Community Engagement Alliance) contra las disparidades del COVID-19.
Información sobre cómo participar en estudios clínicos o donar plasma para ayudar la lucha contra COVID-19.
Lo que necesita saber para ayudar a retrasar la propagación del COVID-19.
Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés) lideran y respaldan la investigación que ayuda a acelerar el desarrollo de pruebas, tratamientos y vacunas para ayudar a mejorar y salvar vidas.
En esta página, encontrará información y enlaces a recursos sobre pruebas, tratamientos, vacunas y estudios clínicos para saber cómo puede ayudar a poner fin a la pandemia y protegerse a sí mismo y a su familia.
¿Por qué todavía necesitamos hacernos pruebas?
Las pruebas son fundamentales para controlar la propagación del SARS-CoV-2, el virus que causa el COVID-19. Hacerse pruebas es la única forma de asegurarse de que no está transmitiendo el virus a otras personas, puesto que incluso las personas vacunadas pueden ser portadoras del virus y mostrar pocos o ningún síntoma.
Hacerse pruebas también proporciona información importante sobre el movimiento del virus dentro y entre comunidades. Los funcionarios de salud pública deben saber cuántas personas están infectadas y dónde viven para que los funcionarios puedan rastrear los brotes y tomar medidas para proteger a los demás.
¿Cómo me hago la prueba?
La mayoría de los proveedores de atención médica ofrecen pruebas de COVID-19, y debe contactarlos primero a ellos si tiene síntomas. El sitio web del departamento de salud de su estado (en inglés) tendrá información sobre los sitios de pruebas locales adicionales.
También puede programar una cita para hacer una prueba de diagnóstico de COVID-19 (reacción en cadena de la polimerasa, o PCR) en muchas cadenas de farmacias nacionales. Las tiendas con carriles para vehículos le pedirán que permanezca en su automóvil mientras un farmacéutico lo guía a hacer el examen usted mismo. Los resultados suelen estar disponibles en unos días.
¿Cómo puedo hacerme una prueba en casa?
Las pruebas rápidas (de antígeno) en el hogar se pueden comprar sin receta en muchas farmacias, y los resultados están listos en tan solo 15 minutos. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) ofrecen más información sobre la autoevaluación, por ejemplo, cómo hacerse un hisopado.
¿Cuándo debo hacerme la prueba de COVID-19?
Si ha estado expuesto al COVID-19, debe hacerse la prueba, incluso si fue vacunado. Hágase la prueba de COVID-19 si:
¿Cuáles son los tipos de pruebas de COVID-19?
Una prueba viral busca una infección actual. Hay dos tipos de pruebas virales:
Una prueba de anticuerpos está diseñada para indicarle si tuvo una infección en el pasado.
Únase a una prueba de tratamiento para el COVID-19
¿Qué debo hacer si doy positivo en la prueba de COVID-19?
La mayoría de las personas con COVID-19 tienen una enfermedad leve y pueden recuperarse en casa. Puede contribuir con su recuperación y evitar que el virus se propague dentro de su familia y a otras personas siguiendo las pautas de los CDC para el cuidado de COVID-19 en el hogar.
En casa
Puede tratar los síntomas leves de COVID-19 en casa con medicamentos de venta libre y reducir las posibilidades de propagación viral con medidas de seguridad básicas. Los CDC ofrecen una guía para el tratamiento de COVID-19 en el hogar.
De su doctor
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) emitió una autorización de uso de emergencia para los anticuerpos monoclonales, que pueden ayudar a su sistema inmunológico a reconocer y defenderse del COVID-19. No todas las personas que tienen COVID-19 califican para este tratamiento. Si tiene COVID-19 y tiene un alto riesgo de enfermedad grave, su médico puede recomendarle anticuerpos monoclonales.
En el hospital
Las personas con enfermedades graves por COVID-19 deben ir al hospital para recibir tratamiento. El hospital puede brindar tratamientos para:
Si el COVID-19 es tratable, ¿necesito una vacuna?
Prevenir el COVID-19 es más eficaz que tratarlo. Las vacunas protegen a las personas de infectarse o de enfermarse gravemente, y las mascarillas y el distanciamiento social ayudan a evitar que el virus se propague
Al vacunarse, también puede proteger a sus seres queridos. Al usar una mascarilla y vacunarse, está protegiendo la salud de otras personas en su vida y comunidad que corren un alto riesgo de enfermarse gravemente o morir de COVID-19.
¿Qué tratamientos para el COVID-19 son efectivos?
La FDA ha aprobado o autorizado varios tratamientos para enfermedades leves, moderadas y graves causadas por el COVID-19. Existe mucha información errónea en línea sobre los tratamientos para el COVID-19. Algunos tratamientos propuestos no han demostrado ser efectivos y podrían ser peligrosos. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. (HHS, por sus siglas en inglés) tiene más información sobre las opciones de tratamiento disponibles para el COVID-19.
La iniciativa Aceleración de vacunas e intervenciones terapéuticas de COVID-19 (ACTIV) (en inglés) de los NIH ha acelerado la investigación sobre los tratamientos para el COVID-19 en varios tipos de tratamiento. A continuación, presentamos algunas de las investigaciones actuales.
Los NIH están patrocinando estudios para probar la seguridad y eficacia de los inmunomoduladores, que minimizan los efectos de una respuesta hiperactiva del sistema inmunológico que experimentan algunos pacientes con COVID-19. Los estudios tienen como objetivo determinar si los inmunomoduladores pueden reducir la necesidad de ventiladores y acortar las estancias hospitalarias.
Anticuerpos para disminuir la gravedad del COVID-19
Se están realizando estudios clínicos respaldados por los NIH para estudiar la seguridad y la eficacia de los anticuerpos monoclonales y policlonales tanto en entornos hospitalarios como ambulatorios. Los estudios están analizando si los tratamientos acortan el tiempo de recuperación y disminuyen los problemas respiratorios y de otro tipo de la infección por COVID-19.
Medicamentos para prevenir la coagulación de la sangre y el daño tisular
Los estudios respaldados por los NIH tienen como objetivo determinar si los medicamentos llamados anticoagulantes pueden tratar a los adultos diagnosticados con COVID-19 y prevenir la formación de coágulos sanguíneos potencialmente mortales. Estos estudios se centran en personas a las que se les diagnostica COVID-19 y están hospitalizadas, así como en aquellas que se están recuperando de COVID-19.
Prueba de medicamentos que ya están en uso
Actualmente, los estudios están inscribiendo a personas que están hospitalizadas con COVID-19 para probar la efectividad de varios medicamentos diferentes que se encuentran en una etapa avanzada de desarrollo clínico. Otros estudios probarán si los medicamentos utilizados para tratar otras afecciones podrían ayudar a tratar el COVID-19 en personas con síntomas leves a moderados.
¿Qué vacunas COVID-19 están disponibles en los Estados Unidos?
En septiembre de 2021, la Administración de Medicamentos y Alimentos de los EE. UU. (FDA) aprobó una vacuna contra el COVID-19 y dos fueron autorizadas para su uso de emergencia.
¿Cuánto tiempo protegen las vacunas contra el COVID-19?
La investigación sobre la inmunidad proporcionada por las vacunas está en curso. Los estudios indican que los niveles de anticuerpos producidos después de la vacunación pueden ser más altos que los niveles de anticuerpos producidos después de tener COVID-19. Los estudios también indican que la protección contra el SARS-CoV-2 comienza a disminuir con el tiempo después de las dosis iniciales de vacuna.
Las dosis de vacuna adicionales (vacunas de refuerzo) pueden proporcionar una protección más duradera contra el COVID-19. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. (HHS) está desarrollando un plan para distribuir dosis adicionales de vacunas de ARNm a quienes califiquen para recibirlas.
¿Cómo sé que las vacunas son seguras?
Las vacunas tienen estándares de seguridad muy altos y las vacunas del COVID-19 no son una excepción. Las vacunas del COVID-19 se han sometido y seguirán siendo sometidas al control de seguridad más intensivo en la historia de los EE. UU.
El proceso para crear las vacunas contra el COVID-19 fue más corto que para otras vacunas por muchas razones, que incluyen:
La seguridad de las vacunas contra el COVID-19 autorizadas se rastrea a través del Sistema de notificación de eventos adversos a las vacunas, un sistema de seguridad único llamado v-safe que se fundó específicamente para las vacunas contra el COVID-19 y para otros sistemas. Los fabricantes de vacunas envían actualizaciones de seguridad mensuales a la FDA. La FDA también inspecciona las instalaciones de producción de vacunas y verifica la calidad de los lotes de vacunas.
¿Funcionan las vacunas?
Los estudios muestran que las vacunas contra el COVID-19 son muy efectivas para prevenir el COVID-19, incluso para personas con alto riesgo de contraer la enfermedad.
A veces, las personas que están completamente vacunadas contraen una infección irruptiva, lo que significa que dan positivo en la prueba del SARS-CoV-2 o se enferman con COVID-19. Las personas completamente vacunadas tienen menos probabilidades de enfermarse gravemente, incluso a causa de las variantes de COVID-19.
¿Tienen las vacunas algún efecto secundario?
Todas las vacunas pueden causar algunos efectos secundarios, que son signos normales de que su cuerpo está produciendo anticuerpos. Estos efectos secundarios desaparecen en unos días. Muchas personas no presentan efectos secundarios.
Los efectos secundarios graves que podrían causar problemas de salud a largo plazo son extremadamente improbables después de cualquier vacuna, incluida la vacuna contra el COVID-19. Estos efectos secundarios raros generalmente aparecen dentro de las seis semanas después de recibir la dosis de la vacuna. Si tiene algún problema de salud después de la vacunación, infórmelo al Sistema de notificación de eventos adversos a las vacunas (VAERS, por sus siglas en inglés).
¿Cómo recibo la vacuna contra el COVID-19?
El gobierno federal está proporcionando vacunas contra el COVID-19 autorizadas por la FDA de forma gratuita a todas las personas que viven en los Estados Unidos, independientemente de su estado migratorio o de seguro médico. Busque en vacunas.gov, envíe un mensaje de texto con su código postal al 438829 o llame al 1-800-232-0233 para encontrar lugares de vacunación contra el COVID-19 cerca de usted. Comuníquese con el departamento de salud de su estado para encontrar lugares de vacunación adicionales en su área.
Si tiene dificultades para llegar a un lugar de vacunación, es posible que pueda vacunarse en su hogar. Consulte una lista de servicios que pueden ofrecer vacunas contra el COVID-19 en el hogar dentro de su área.
¿Las vacunas protegen contra las variantes del virus?
Los estudios y los datos actuales muestran que los anticuerpos que nuestros cuerpos producen después de la vacunación reconocen y protegen contra las variantes del COVID-19. Esto se está investigando de cerca y se están realizando más estudios.
El aumento de estas variantes es un recordatorio de que, mientras el SARS-CoV-2 continúe propagándose, tiene el potencial de evolucionar hacia nuevas variantes. La vacunación generalizada ayudará a reducir el aumento de variantes adicionales.
¿Cuándo pueden vacunarse los niños?
Los niños y adolescentes de 12 años o más ahora pueden recibir la vacuna Pfizer contra el COVID-19. Las vacunas contra el COVID-19 aún no están autorizadas para su uso en personas menores de 12 años (Pfizer) o 18 (vacunas Moderna y Johnson & Johnson/Janssen). Sin embargo, ahora se están realizando estudios clínicos para probar la seguridad y eficacia de las vacunas disponibles actualmente en niños más pequeños. Los expertos esperan que las vacunas estén autorizadas para niños y adolescentes a fines de 2021.
¿Se siguen investigando las vacunas?
Se están realizando estudios sobre las vacunas, algunos nuevos y otros que ya estaban en curso. Los institutos y centros de los NIH, en asociación con empresas privadas, continúan estudiando diferentes tipos de vacunas.
Algunas investigaciones actuales tienen como objetivo determinar si las vacunas aprobadas otorgarán inmunidad contra las variantes emergentes de COVID-19 y si se necesitarán nuevas vacunas. Otros estudios de vacunas continúan monitoreando la salud de las personas que ya han recibido una vacuna para determinar su eficacia durante un período de tiempo más largo.
Los investigadores de los NIH también están probando regímenes de vacunas mixtas. Los voluntarios adultos que han sido completamente vacunados contra el COVID-19 reciben dosis de refuerzo de diferentes vacunas contra el COVID-19. Los científicos evalúan la seguridad de los regímenes potenciados mixtos y controlan los niveles de anticuerpos resultantes.
¿Qué es un estudio clínico?
Un estudio clínico es un estudio de investigación médica con voluntarios. El propósito de los estudios es determinar si un nuevo tratamiento o vacuna funciona y si es seguro para las personas. Después de que los investigadores prueban a fondo nuevos tratamientos o vacunas en el laboratorio para asegurarse de que puedan beneficiar a las personas, los tratamientos más prometedores pasan a los estudios clínicos.
¿Por qué debería participar en un estudio clínico?
Las personas participan en estudios clínicos por diversas razones. Considere unirse a un estudio clínico de COVID-19 si desea:
¿Son seguros los estudios clínicos?
Si participa en un estudio clínico, su seguridad estará protegida. Cada investigador clínico debe monitorear a los participantes para asegurarse de que estén seguros. Estas salvaguardas son una parte crucial de la investigación.
Red de prevención de COVID-19 (CoVPN, por sus siglas en inglés)
La CoVPN realiza estudios clínicos de fase 3 para las vacunas contra el COVID-19 y los anticuerpos monoclonales.
CombatCOVID.HHS.gov
Este sitio web proporciona más información sobre los estudios clínicos actuales del tratamiento contra el COVID-19
ClinicalTrials.gov (en inglés).
Esta base de datos en la que se pueden realizar búsquedas muestra estudios clínicos con apoyo federal y privado que estudian el COVID-19 en los Estados Unidos y en todo el mundo.
Lea sobre las últimas investigaciones para comprender cómo el COVID-19 y las vacunas para prevenirla afectan nuestra salud, el embarazo y la lactancia, a los niños y más.