Un patito feo entre vinos

Crónicas de la Resistencia x Pat

- Hace unas semanas estaba con el resto de Resistencia y alguién más comprando una pizza en Ugi´s de 9 de julio. Era sábado de madrugada, lleno total, cajas vacías y estómagos hambrientos. Cuándo ¿un punk? o un HC venido a menos? nos encaró agresivamente para que le diéramos “pizzzzzzzzzzzaaaaa”. Indignación. Yo puedo compartir una pizza con alguien que tiene hambre y me lo hace saber. Pero no puedo soportar que un infeliz venga a manguearme de mala onda y explicarle que somos cuatro para una pizza y que no tenemos plata y que conteste para el orto. No entiendo porque manguear a uno que ves en la calle y que está como vos. ¿Por que no te vas al bar re-cheto de la vuelta a manguear a los que tienen plata? Obviooo!!!. Parece que “algo hay que hacer en contra de...”. Es un sentimiento muy punk, muy anarco. Por ejemplo, ¿por que no utilizar el tiempo y esfuerzo en proyectos que den beneficios para uno? Cualquier intento y logro por tus convicciones es un paso adelante sobre lo que te oprime.
- En noviembre Rebelión Rock junto a algunos individuos organizaron un festival (dos días) en una caverna construída por la artista plástica Silvina Apas en el Centro Cultural Recoleta. Una cueva tipo los vampiros de Lost Boys, impresionante, donde la autora –además de que la obra pueda ser apreciada en sí- quería que pasaran cosas adentro. Pero yo no voy a contar todo lo que pasó, sino algunos detalles.
Día 1: Camisa Fantasma, Cadáveres, Estado Mayor Conjunto.
Día 2: Acido Camboyano, Detenido Desaparecido, Cross.
A pesar de haber ido a varios medios a publicitar el evento, nadie le dió mucha bola. Solo algunos de la Rock & Pop se hicieron eco del tema, el “Sí” publicó el aviso con errores, etc. Los medios independientes sí lo difundieron. Lo que me ocupa es comentar una muestra de la falta de respeto que puede llegar a tener hasta la mejor buena intención. Era un festival autoproducido (en el circuito underground la mayoría de los gigs son autoproducidos) y constaba de grupos tocando desde la tarde, como escenografía el increíble lugar del que colgaban las banderas de las bandas y de Rebelión Rock y un puesto de fanzines y cassettes.
1. Algunos de los que organizaban taparon con una bandera de Rebelión Rock donde figuraba el nombre de la artista Silvina Apas y la descripción de materiales con que había construído la cueva.
2. Había que poner una mesa con fanzines: al no encontrar objetos adecuados para fabricar un puesto, tomaron un cuadro de adentro de la cueva para utilizarlo como mesa sobre dos caballetes.
3. Algunos pretendían hacer pintadas sobre unas frases escritas por la artista sobre su obra (tal vez estaban cegados por la fuerza del objetivo). Una vez advertidos abandonaron la idea y optaron por escribir AUTOPRODUCIDO o AUTOGESTIÓN (no recuerdo) en la entrada. Alguién con un aerosol escribió sobre una de las pinturas laterales de la cueva el muy punk FUCK YOU.
Está bien: es muy punk. Me cago en cualquier cosa y le hago “fuck you” a todo, no me importa lo artístico, cualquier medio es bueno para una acción pro-rebelde (por ej, el cuadro como mesa es el medio para distribuir material indie, etc). A mí personalmente me parece que no dan estas actitudes que enumeré, tan “descuidadas”, y sinceramente de no conocer a algunos de los responsables de tales actitudes, pensaría que más que nada estaban siendo irrespetuosos y desconsiderados con respecto a lo que otro, que provenía de alguien que les había cedido el espacio. Algo así como una actitud donde LO MIO ES LO MAS IMPORTANTE y valedero, yo tengo la razón y la verdad y tengo el derecho que yo mismo me doy a utilizar cualquier medio para lograr lo que quiero. Hmmmm, claro que sí!!!!
Por otro lado parece que se esperaba que las bandas que participaban en el festival, incluídos todos los miembros de cada banda, se comportaran de una manera autogestionaria, lo cual era desubicado ya que la mayoría solo estaban interesados en tocar (bueno, por eso tienen grupos!!). Se esperaba que los miembros de las bandas hicieran y repartieran volantes, fueran a radios, trasladaran los equipos, ayudaran a instalar las cosas, cobraran entradas, etc. Es decir: lo que habitualmente hacemos cuando tocamos. Las tareas son fáciles de dividir, pero pretender que todos tengan el mismo espíritu....eso es lo desubicado. A todo momento se insistía con lo “autoproducido”. Qué era? El show? “Vengan y paguen para ver a los autoproducidos!!”. No le veo nada de sentido.
Autoproducción y autogestión es muy fácil de escribir en un volante o en la puerta de un recital, pero el respeto, la discusión y entendimiento que conllevan a buen destino tan altos ideales son MUY MUY difíciles de lograr.
Personas programadas con discursos y leyendas sobre como tal en determinado lugar sí logró ser “un grupo autoproducido” no sirven para la autogestión,
1. Porque para lograrla hay que confiar en la propia mentalidad y voluntad.
2. Porque no se puede tener que estar dependiendo de los demás o pretender indicarle al otro lo que se debe hacer o no.
3. ¿Por qué a toda costa intentan que la autoproducción o autogestión sean “patrimonio del punk”, en especial de los grupos? No entiendo a quienes creen que los grupos son los encargados de llevar adelante “la revolución”. Es como darles demasiada importancia, o erigirlos en especies de líderes, víctimas y héroes a la vez. Por suerte es una tendencia estúpida de pensamiento que está desapareciendo.
Vuelvo a lo que estaba venía comentando antes sobre el festival. Comprobar que gente que tiene un speech “rebelde”, en lo cotidiano y pequeño parecen tener tendencia a lo autoritario e irrespetuoso. Tener grandes ideales y estar “en contra de” no debería impedir poner en práctica esos grandes cambios desde la vida diaria.
Un tip: en ese festival, mientras estaba tirada abajo de un árbol comiendo queso y tomando cerveza, alguién me vino a preguntar si no me “acordaba” de algún slogan tipo CRASS/CONFLICT!! Claro, como no me voy a acordar, si los utilicé tanto! Pero digo yo, ¿hace falta remitirse a tan atrás? No porque esos principios estén fuera de moda, sino porque creo que repetir siempre lo mismo más que denotar un “ser consecuente” denota un “ser poco inteligente”. Las consignas simples y directas son efectivas, pero algunas por tan dichas pierden aparentemente el sentido propagandístico, se tornan vacías de contenido al haberlas repetido tantas veces. Creo que a veces hace falta profundizar con pensamientos algún nuevo acercamiento a los mismos viejos temas....
Ser punk, rebel, HC, etc, no es ninguna garantía de nada. Ser parte de un “movimiento” puede ser un maravilloso escudo con el que taparte durante algún tiempo, pero creo que te deja inmensamente vacío si no te esforzas en darle bola a tus más profundos deseos y ganas. Ponerlos en práctica más allá de todo y todos...seguramente serás un poco más feliz!.

PAT / Resistencia Nro. 7 / Marzo-abril 1993



Nota de la Redacción: Tras la publicación de esta columna en su zine, buena parte de los nombrados le retiraron a Patricia el saludo. Por un tiempo no pudo participar en ferias ni vender los zines y cassettes en la Feria de Congreso ni en el Parque Rivadavia. Fue bardeada en varios recitales, maltratada y denostada en los circuitos under. Por suerte, por constancia y por actitud pudo sobrellevar esa época y continuar haciendo lo que continúa haciendo 16 años después: música, escritura, ferias y eventos culturales.

Batahola en local bailable

Crónicas de la Resistencia x Pat

Diario clarín 11 de julio 1984

Se conocieron ayer detalles de una descomunal batahola protagonizada por unos veinticinco “punks”-varones y muchachas- que irrumpieron en un local bailable y se dedicaron a destrozar salvajemente las instalaciones además de atacar al público con cadenas y pulseras tachonadas. Pero al llegar la Policía trataron de escapar, más de catorce están detenidos. Eran las 3 de la madrugada del domingo último. En la sede del centro Lituano de Lanús Oeste, avenida Santa Fe 3175, celebraban una reunión bailable los estudiantes y un grupo de docentes de la Escuela Técnica Nº 7 de Lanús. Todo transcurría en un clima de alegría cuando súbitamente ingresaron los “punks” todos rapados y en ropa de cuero, pulseras y dijes, algunos empuñando cadenas. Sin más trámite, atacaron furiosamente a los concurrentes y comenzaron a volcar mesas y a romper botellas. El pánico se generalizó y los jóvenes trataron de huir en todas direcciones. Según un testigo el mayor salvajismo corrió por cuenta de algunas chicas “punks”, al parecer alcoholizadas. La Policía, que interrumpió el desborde de los vándalos, arrestó a catorce exaltados, entre los cuales algunos son mexicanos y chilenos. Todos fueron conducidos a la subcomisaría de Villa Caraza y lo más asombroso del caso es que los exóticos personajes viven en la Capital Federal, lo que hace pensar que eligieron los escenarios sureños para sus correrías con la presunción de ser allí impunes.

Lo que realmente sucedió
Se conocieron ayer detalles de una descomunal batahola protagonizada por unos 15 “representantes de la ley” que irrumpieron en un club aterrorizando al público, además de atacarlos con machetes. Eran las 3 de la madrugada del domingo 8 de julio. En la sede del Centro Lituano de Lanús Oeste, avenida Santa Fe 3175, celebraban una reunión bailable los estudiantes y un grupo de docentes de la Escuela Técnica Nº 7 de Lanús. Varios números artísticos animaban la reunión, entre ellos dos grupos de punk rock que habían sido invitados: Los Reaccionarios y Los Inservibles. Todo transcurría en un clima de alegría, Los Reaccionarios habían interpretado ya tres temas de su repertorio y los punks bailaban pogo entre ellos sin molestar a nadie, mientras el resto del público observaba asombrado el espectáculo. Subitamente ingresaron las fuerzas policíacas todos rapados y con chapas e insignias sobre sus ropas azules, además de empuñar machetes e itacas. Sin más trámite, atacaron furiosamente a los punks, El pánico se generalizó y los jóvenes trataron de huir en todas direcciones. Según un testigo algunas chicas punks se resistieron a acompañar a la policía por la forma salvaje en que habían sido detenidos. Una menor fue arrastrada de los pelos y otros chicos fueron sacados a machetazos.
La policía que interrumpió el buen momento que estaban pasando los concurrentes, arrestó a 37 chicos y chicas. Todos fueron conducidos a la subcomisaría de Villa Caraza. Lo más asombroso del caso es que los exóticos personajes “encargados de la seguridad” de la población actuaron en forma injusta y descarada, mintiendo a padres, medios de difusión y todos cuantos quisieran averiguar lo sucedido. Esto hace pensar que eligieron a los punks (siempre víctimas de la ignorancia y el sensacionalismo barato de la prensa y la gente), para sus correrías con la presunción de que saldrán impunes.

Pánico en Caraza
Los que cayeron eran en su mayoría punks, como 50 en un principio, de los cuales catorce quedamos pegados (cuatro mujeres, 10 varones, integrantes de conocidas bandas locales tales como Inservibles, Comando Suicida, Tumbas NN, Los Baraja, Alerta roja). El incidente se armó por la denuncia que hicieron padres y profesores del ENET, denuncia que nadie pudo leer. Los menores fueron detenidos por averiguación de antecedentes, algunos fueron maltratados por el oficial Labín y el domingo al mediodía somos nuevamente obligados a firmar, pero esta vez se trata de declaraciones de contravención. (jamás declaramos!!!)
Por las sucias tretas del oficial Labin, las mujeres fuimos trasladadas a la Brigada de Remedios de Escalada: el tipo nos dijo que no teníamos antecedentes pero para verificar nos llevarían hasta una unidad de Lanús que tenia digicomb, el traslado sería en la patrol que después de terminado el trámite nos alcanzaría hasta la parada del colectivo...qué amables!!! Sospechoso de movida, estuvimos varias horas sin que nadie supiese nuestro paradero: cárcel de mujeres, original! Los chicos quedaron en Caraza, el 10/7 se nos hizo conocer los artículos que habíamos infraccionado (35-36-72-75), violación de propiedad privada, desorden en vía publica, desacato a la autoridad y ebriedad. Las sentencias iban desde 25 días de arresto y 5000 de multa hasta 30 días. Finalmente pasamos 5 días en prisión, gracias a que algunos padres pusieron abogados. Quedan para otra vez los relatos de la vida tras las rejas; situaciones que cualquier persona que caiga en manos de la policía deberá sufrir.

5 días de prisión por 5 minutos de pogo
Esta es una historia (entre tantas otras) de mentiras e injusticias y de cómo el fascismo y la represión siguen queriendo controlar nuestras vidas. El oficial Labin quien es policía en consecuencia a sus más altos ideales de justicia fue el mayor responsable de esta historia. Podemos darnos una idea de su persona por algunas frases memorables que pronunció: “estos chicos en la época de los militares desaparecían directamente”, o “en este momento no los podemos tocar, pero tenemos un arma muy importante: la máquina de escribir”, esta mucho mejor “los chicos son irrecuperables para la sociedad porque están en contra del fascismo”
Para todos aquellos que creen en la democracia y los gobiernos de cualquier tipo: tengan bien en cuenta lo que pasó. El oficial Labin no ingresó en la policía el 10.12.83, está allí desde bastante antes, como la mayoría del personal policial. Y están para hacernos acordar que ellos tienen poder y pueden utilizarlo como quieran. La seguridad de quienes integran la sociedad depende de ellos, pero no hay que olvidar que sujetos como Labin o el policía de la esquina gozaron de la impunidad que les proporcionó el Proceso y pueden ser tan responsables como cualquier otra fuerza paramilitar de torturas y desapariciones.
Muchos ahora están tranquilos en sus casas y a la cana confían su seguridad y libertad. Es bueno saber que estos representantes de la ley harán cualquier cosa para mantener limpia la ciudad, como por ejemplo llevar a alguien en averiguación de antecedentes si la más leve sospecha lo señala como peligroso para la sociedad, su forma de vestir, pensar y/o expresarse así lo indica (sean punks, cirujas, heavies, prostitutas, gays, hippies y demás grupos marginales)
Sea culpable o inocente, sean o no condenables sus actitudes o pensamientos, se halla sin protección alguna frente al poder de estos individuos que cuentan con el aval de la prensa amarilla (Flash, Tal cual, Crónica, Diario Popular, etc) que se presentan al juego sucio de la difamación publicando notas en las cuales se recorta maliciosamente las declaraciones de quienes de buena fe tratan de hacerse escuchar y dirigiendo la información de manera tal de hacerlas objeto de sus fines sensacionalistas.
Si mediante la ley todas las mentiras que nos imputaron en Caraza fueron transformadas en verdades, ¿QUE LEY NOS IBA A PROTEGER A NOSOTROS VICTIMAS DE ESA FARSA?. En la argentina de hoy, donde a pesar de los problemas económicos y demás, la mayoría está feliz de “vivir en democracia”, no puede permitirse nada que afee la superficie, nada que haga pensar que las cosas no son tan buenas, nada de gente vendiendo artesanías, libros o comida en las plazas, ya que esto es evidencia de la gran desocupación. Nada que demuestre que el sistema que ellos defienden es bueno para unos pocos y mortal para la mayoría.
Por ultimo: Reclamamos justicia para todos, Y SI BIEN NUNCA TENDREMOS LA LIBERTAD QUE NOS CORRESPONDE POR NATURALEZA VIVIENDO GOBERNADOS, AL MENOS EXIJIMOS LO QUE NOS CORRESPONDE VIVIENDO BAJO ESTE GOBIERNO LLAMADO DEMOCRATICO.

Luchar y resistir

Democracia? derechos??garantías constitucionales???? Nuestros derechos son mínimos conozcámoslos!!!!!!



Texto publicado originalmente en el Resistencia zine Nº 1, año 1984.
Esto fue lo que puse en mi Fanzine en aquella época sobre la detención que se menciona en el párrafo final de la columna anterior.

Rebelde con causa (mi primera camiseta punk)

Crónicas de la Resistencia x Pat

Las paredes de mi cuarto estaban llenas de pósters y fotos de seres que me llamaban irremediablemente la atención; lucían espectaculares y no veía el momento de escucharlos: Ramones, Iggy Pop, una foto de Patti Smith donde parece Rimbaud (con campera de cuero negra de tachas chiquitas y camisa blanca con los puños salidos y una seriedad que me impactaba marcándome con un estilo para toda mi existencia), las fotos de la Pelo de Pretenders donde Chrissie Hynde lucía tan segura empuñando una guitarra, The Clash, ni hablar!!! solo quería lucir como Patti Hearst y Paul Simonon y que mi ropa fuera un panfleto caminante. Rastreaba cualquier revista o pedazo de noticia que incluyera estos nombres en locales de revistas usadas, hasta que descubrí la Expreso Imaginario, una fuente cultural donde leí las crónicas de recitales de Los Violadores y una de Los Clash, Los avisos clasificados en la revista y las cartas de lectores mencionaban a varios punx locales, lo que me producía una gran curiosidad y atracción. Todos mencionaban el Parque Rivadavia y hacia allí comencé a dirigirme tímidamente. Ahí conseguí lo básico, End of the Century, London Calling y el primero The Clash, el de Patti. Era demasiado, sonaban exactamente como lucían (lo sabía!! no iban a decepcionarme!).
Creo que no sé describir el sentimiento que te produce escuchar música que cambiará tu vida, fue como descubrir la vocación de mi vida, fue como ver una luz, no todo era tan opaco y gris como lo que proponía una sociedad salida de años de represión, muerte, oscurantismo y cero de valor por la cultura, no existía la decisión personal, ni las convicciones, ni nada, habían matado a todos y atemorizado al resto!
La nota que leí en Expreso Imaginario sobre The Clash fue todo!!! Mencionaban su cultura roots reggae estudio one Jamaica, Sandinista! Muchas puertas se abrían y yo seguía tomando notas de nombres en un cuaderno y solo era buscar revistas e investigar por ahí, porque no hablaba con nadie y porque no era nada fácil conseguir esta información. Todavía habían discos, canciones, pelis, libros y personas prohibidas. Por una extraña coincidencia conocí un punk: Marcelo Clash, era uno de los que escribía incisivas críticas en la sección de correo de lectores de La Pelo y el Expreso, se trataba de arengas contra el rock nacional firmadas por este personaje u otros como el mismismo Hary B, Javier Huevos, Marcelo Poca Vida, Vil Baraja y otros nombres atemorizantes!! También leí una nota en la revista La Semana donde aparecían Vil Baraja y su esposa Mirta como punks más intelectuales, y están todos en las fotos: Fidel, Andrés Control, Virginia, Mónica , MPV. Lucían extrañísimos, como seres de otro planeta, hablamos de una época en que nada NADA salía del estereotipo gris del ciudadano. Había algún hippie y algunos heavies tipo V8/Riff –qué eran tan o mas extraños que los punks, pero no mucho más.
No paré hasta contactar por medio de un clasificado a Vil Baraja, había leído que el decía que los punks tenían muchas cosas claras, eran críticos del sistema y que a pesar de lucir tan descontrolados y malos tenían una visión inconforme de la sociedad y planeaban cambiarla. Sentía que era lo mío, pero hacerse punk en esas épocas era muy difícil. En tu casa, en el barrio, en tu grupo de amigos, en todos lados una mirada hostil te condenaba. Requería una gran valentía y el estar decidido a pelearse, bancársela, salir a la calle, era una cuestión muy seria. Contacté a Vil, el tenía un zine llamado Reacción punk. Vino (desde La Plata) un sábado hasta mi casa en Boedo, yo recién me había cortado el pelo como pude y me trajo de regalo una cinta con el primero de Damned, el primero de Los Clash y unos temas de su banda Los Baraja.
Yo me iba a la cama escuchando I feel allright y So messed up, eran la Biblia, y para despertarme The Clash en el Winco que estaba al lado de la cama. Cuando vi la peli Rude Boy donde hay una escena similar sentí que andaba bien encaminada.
Me iba haciendo de ropas punks pero no sabía como, los veía de lejos en la puerta de los recitales y eran todos muy zarpados y especiales. Así que opté por el saco de un traje de mi papa, tiradores de mi abuelo, pantalones y remera negra alfileres y pins ultra artesanales con inscripciones contra la sociedad.
Comencé a cartearme con Tommy Gun, un punk de Wilde que resultó una gran influencia en mi, me envió por correo el libro PUNK LA MUERTE JOVEN, ¿lo podés creer? me lo devoré en un día. Las fotos, los testimonios, el vocabulario, la propuesta, esto era lo mío: gente que no encajaba, querían hacer lo que les daba la gana sea protestar, no estudiar, no trabajar, tener una banda, hacer un fanzine, escuchar música y hacer las cosas de otra forma. Un gran plan que salvaría mi vida de cierto modo, yo no tenía futuro, miraba a la gente hacer sus vidas diarias y lloraba, me negaba a eso, pensaba que tenía que haber algo mejor, algo más satisfactorio personalmente. Yo era triste, tímida y tuve mi primer crisis existencial grave que me dejó un mes entero sin hablar. Recuerdo que mi mamá se preocupaba de que fuera tan introspectiva y no quisiera ver ni a mis amigas de softball ni de la escuela, ni continuar en la universidad., en fin, los típicos problemas. Después de muchas dudas e indecisiones, de leer ese básico e imprescindible libro de Juan Carlos Kreimer , mas algunas notas de revistas periódicos locales en las que todos coincidían en lo mismo: “Cualquiera puede tener una banda, tocar, cantar; no hay ningún título que habilite ni ninguna regla fija para hacer punk rock.”, eso hice. Yo no sabía tocar nada, solo tenía muchas ganas y una guitarra criolla a la que aporreaba sin ningún tipo de talento, jamás había podido acceder a estudiar instrumentos, mis padres no podían pagármelo.
Yo creo que es difícil imaginar el impacto que causaba algo nuevo como el punk en ese momento, vuelvo a mencionar que recién salía el país del oscurantismo terrible de la dictadura cuya horrenda influencia permanecía viva en la gente, en la educación, en la policía. Y si bien disfrutaba muchísimo las miradas desaprobatorias de los transeúntes pronto conocí el precio del rechazo: era todo un logro encontrar un bar en el que te dejaran sentar a consumir algo, denuncias de vecinos, ser detenidos una y otra vez. De ahí adquirí mi seriedad, era la forma que había elegido para mostrarme ante los demás: seria, crítica, punk.
Fui a un par de recitales en los que me quedaba en la vereda de enfrente observando. Yo los respetaba pero era demasiado tímida para acercarme, fui a dos recis finalmente (en uno caí presa como todos los demás) pero no parecía que nadie fuera a hablarme jamás. Como ya dije aparecían avisos clasificados en las revistas Pelo, en el Expreso Imaginario firmados por los punks locales, para comunicarse, para detectar a otros iguales. Parecían las señales que tiran los astrónomos en búsqueda de civilizaciones en el universo. Así que yo también puse un aviso en “Segunda Mano” pensando que nadie lo iba a ver, me ofrecía para tocar y cantar: ¡qué caradura!!. Me llamó todo el mundo (éramos muy pocos) y los que me parecieron mas amables y mas inofensivos fueron un tal Marcelo y alguien mas del grupo Los Inservibles. Era lejos, el ensayo, en Beiró y General Paz, pero fui y me trataron excelentemente. En ese momento era casi implícito el tema de tomar pastas anfetamínicas, alcohol, pegamento, aspirar, cualquier cosa que pegue, estaba “súper bien visto”, el reviente parecía inevitable; para una persona con problemas de comunicación y relación como yo calzaba todo perfecto (angustia y descontrol de por medio). La cuestión fue que los chicos de Los Inservibles me colgaron una guitarra Faim Les Pauls negra y me enseñaron a tocar quintas. En seguida me pasaron las canciones y a las dos semanas me consiguieron una guitarra que estaba en venta. En LOS INSERVIBLES estaban: Marcelo (cantante), Jose Luis (baterista excelente que tocaría en Cadáveres de niños, Mutantes del Kaos y otras bandas más). Me costó aprenderme los temas pero lo hice, lo difícil fue cuando me pasaron las letras ya que para entonces estaba bastante politizada y no me gustaba mucho lo que decían , pero tampoco podía cambiarlas: tenía que usar esta oportunidad de estar en un grupo que era lo que soñaba desde pequeña. Ensayaba con ellos pero también por otro lado había conocido a los punks del centro a quienes había considerado tan atemorizantes en el pasado: Gamexane, Marcelo Poca Vida, Fidel, Manners, Ana, Virginia, Mónica. Ellos no es que fueran del centro, todos eran de distintos lugares (Lanús, Zona Norte, Mar del Plata, etc.,) pero iban a Vinicius, Einstein, etc. Yo salía con una botella de vidrio vacía, iba a la ferretería de dos cuadras de lo de mis viejos, compraba bencina y me aspiraba una buena parte antes de subir al colectivo 85. Luego bajaba en Beiró y Gral. Paz cruzaba la autopista, paraba en un pastizal y me aspiraba media botella y así iba fumando 43/70 caminando haciendo curvas hasta el ensayo. Tocamos varios shows, en el Hardrock de Vicente López aquel verano 83/ 84, donde también tocaron Comando Suicida, Muerte Civil, Día D y otros y luego dos conciertos mas, porque los recitales eran tres o cuatro o cinco por año, no mas (al menos esos 1983 y 1984 y un poco también el 85). Era todo demasiado esporádico. Con intermitencias seguimos hasta el año 1985 cuando dimos nuestro ultimo show en una escuela en Lanús Oeste y cayó la policía y fuimos todos presos por cuatro contravenciones: 30 días tras las rejas, que al final solo fueron siete. Para este entonces había adquirido la mala costumbre de tomar mucho y tener capacidad para tomar cada vez mas, los edictos ese día fueron: ebriedad, desacato a la autoridad, escándalo en vía pública, resistencia a la autoridad. Cuando salí del centro de Detención de Remedios de Escalada (para mujeres) ya tenía otra banda en mente con Pablo Rodríguez (el chino tatoo), Carlitos Casanovas, Manners y yo. El nombre lo tenía en el corazón también: SENTIMIENTO INCONTROLABLE, pero bueno, esa ya es otra historia.