El término observación de aves se utilizó por primera vez por Edmund Selous en 1901. Su libro titulado “Observación de aves” fue una de las primeras clasificaciones de aves, siendo buscado por razones estéticas. Desde entonces, la observación de aves o avistamiento de aves, ha dado lugar a grupos de personas que se preparan con sus lentes de alto alcance.
Era Victoriana
Durante la época victoriana, la observación de aves fue practicada con el interés de recoger huevos y pieles de especies exóticas. En aquel momento, los coleccionistas de posiciones acomodadas del Reino Unido fueron conocidos por utilizar algunos contactos de las colonias inglesas para obtener acceso a especies raras de todo el mundo. En el siglo 19 los gritos de la conservación sonaron y la primera Sociedad Audubon se estableció en Estados Unidos para combatir el comercio de aves. Las Sociedades Audubon y la Sociedad Real para la Protección de las Aves (RSPB) en el Reino Unido emplearon la observación de aves como una actividad recreativa y como una forma de conservación de numerosas especies de aves.
Siglo XX
Con el inicio del avance óptico y las guías de campo, la observación de aves explotó en la costa este de los Estados Unidos. Inicialmente como pequeños grupos y luego continuaron conformándose para actividades como protestar contra la Unión de Ornitólogos Americanos (AOU) y la Fundación Británica de Ornitología (BTO). Las cuales, en lugar de estudiar las aves basándose en la observación, estaban más preocupados por la captura y el estudio invasivo que provocaba la inevitable muerte de las aves. Con el tiempo, el ornitólogo viajero, Tom Harrison se hizo cargo de la RSPB en 1936 y fue pionero en varias encuestas del somormujo lavanco, el cual es propio de Europa y Asia.
Años después
Así como los amantes de las aves tomaron el cielo, también tuvieron las posibilidades de observar aves en las partes menos transitadas del mundo. El transporte aéreo se hizo accesible en la década de 1960 colaborando así con la observación de aves internacionales. En 1965 la primera empresa de turismo de aves en Gran Bretaña, Ornitholidays, abrió sus puertas a la comunidad de devotos observadores de aves armados con binoculares y cámaras de vídeo. Una vez abierto, Ornitholidays se solidificado como una transnacional de Observación de aves convirtiéndose en una atracción turística popular.
Esto conllevó a la mayor clasificación de aves alrededor del mundo y la creación de una literatura fundamental como el Manual de las Aves del Mundo, el primer multivolumen con la lista de cada especie viviente de aves. Escrito en España en la década de 1990 por Josep del Hoyo, Jordi Sargatal y Andy Elliott, dicho manual es el primer manual destinado para cubrir todas las especies vivientes conocidas de aves detallado en una sola pieza de trabajo.
Fuente: thermalbirding