Lo que comenzó ayer como una protesta pacífica en Chomes Puntarenas, terminó con acciones de violencia, lanzamiento de gases lacrimógenos, 11 personas detenidas, personas inocentes agredidas, daños a la propiedad privada y momentos de gran tensión.
Unos 200 vecinos de territorios costeros de Guanacaste y Puntarenas protestaban en la carretera Interamericana Norte porque no se les resolvieron problemas, a pesar de las promesas del gubernamental Partido Liberación Nacional.
Las protestas unieron a vecinos por problemas de agua como en la comunidad de Playa Potrero, un camino en la Península de Nicoya, y por la aprobación de la Ley de Territorios Costeros (TECOCOS), promesa de la presidente Laura Chinchilla en julio último, durante la celebración de la Anexión de Guanacaste a Costa Rica.
Los violentos incidentes se presentaron pasadas las 2 de la tarde frente a la gasolinera San Gerardo, punto en el que los manifestantes bloquearon ambos carriles de la vía, produciendo presas de hasta mas de 10 km en ambos sentidos. La Fuerza Pública golpeó gente, detuvo a más de doce personas y lanzó gases lacrimógenos en las inmediaciones de la gasolinera del sitio donde mantenían el cierre de la carretera. Dijeron que algunas de las bombas cayeron en la gasolinera de Chomes y la policía entró a hacer arrestos, incluso, en propiedad privada, destrozando un restaurante contiguo a la gasolinera.
Igualmente, acusaron a los efectivos de la Fuerza Pública También de prender fuego a la maleza en un lote cercano, de golpear a señoras, adultos mayores y hasta un menor de edad.
De acuerdo con los vecinos, 60 mil familias están en riesgo de desalojo y exigen la aprobación de la Ley de Territorios Costeros Comunitarios (TECOCOS), que no ha sido enviada por el Ejecutivo a la Asamblea Legislativa, según promesas de la mandataria Chinchilla.
“Quieren desaparecer las comunidades costeras para que desaparezcan los pescadores artesanales., porque así van a fortalecer la pesca comercial a gran escala que tanto daño le hace a la naturaleza”, dijeron dirigentes comunales.
Además, “quieren demoler las humildes casas de las familias costeras para entregar las costas a proyectos millonarios de lujo, que roban el agua de los pueblos costeros”. A causa de los gases ocho personas fueron atendidas en la clínica de Chomes con problemas respiratorios,
Como saldo de la represión, resultaron 12 personas detenidas, varias golpeadas fuertemente, entre ellas una con las costillas rotas, varios adultos mayores con crisis respiratorias por los gases.
Los organizadores dijeron que en la protesta se encontraban habitantes de 73 comunidades costeras y lamentaron que ese sea el diálogo propuesto por el PLN para las zonas costeras.
“De la manera más cobarde la policía por órdenes de Casa Presidencial atacó con gases y balas la manifestación pacífica de los pueblos costeros”, denunció en un mensaje, Wilmar Matarrita, dirigente de las comunidades costeras.