Trump busca impuesto de 20% a importaciones de México para pagar el muro

Donald Trump está explorando varias opciones para pagar la construcción del muro en la frontera con México, entre las que se encuentran gravar las importaciones en una relación comercial en la que cada día se intercambian más de 1,500 millones de dólares en mercancías entre ambos países.

Las opciones que estudia Trump junto con su equipo, de acuerdo con Sean Spicer, vocero de la Casa Blanca, se perfilan para conformar un mecanismo que logre pagar casi por sí solo la construcción de dicho muro cuyo costo se calcula en por lo menos 16 mil millones de dólares.

"Al hacerlo, podemos hacer 10 mil millones de dólares al año y fácilmente pagar por el muro con solo éste mecanismo. Eso realmente va a proporcionar un financiamiento", dijo el vocero de la Casa Blanca al respecto.

Entre las propuestas que están explorando se encuentra un impuesto que podría ser del 20% a las importaciones de varios países importadores de mercancías y productos.

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De acuerdo con Ramón de la Torre Medina, abogado fiscalista asociado de García Barragán Abogados, egresado de la Universidad de Nueva York, estas opciones que explora el equipo de Donald Trump tendrán que ser presentadas al Congreso, y forman parte no sólo de una situación coyuntural, sino también de una reforma fiscal que quieren implementar desde hace mucho.

"La reforma fiscal hace mucho que la quieren hacer y no han podido debido a las divisiones en el Congreso, ahora que la mayoría es republicana, no sé qué tan fácil sea", detalló el fiscalista.

Respecto a la opción de imponer impuestos a las exportaciones, Ramón de la Torre Medina la califica como "totalmente proteccionista", toda vez que su intención es desincentivar el consumo de productos extranjeros y tener oportunidad de promover el consumo local.

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Sin embargo, aclaró que estas solo eran opciones que de ser evaluadas positivamente formarían parte de una propuesta que tendría que pasar por el Congreso y que debería de cumplir varios aspectos. También recordó que a pesar de todo el ruido mediático, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) estaba vigente aún.

A pesar de que se incentivaría el consumo interno en Estados Unidos, los consumidores serían los primeros en resentir estas medidas, ya que aumentarían los costos de productos a los que ya estaban habituados y en la medida en la que se refugien en productos estadounidenses, afectarían a los países exportadores.

De iniciar los trámites para aprobar un impuesto sobre las importaciones, Estados Unidos tendría que esperar más de un año para poder ver su aplicación: "El TLCAN sigue vigente, sigue habiendo un comercio abierto en Estados Unidos, como es el caso de los aguacates, eso fue otra cosa, no fue ninguna traba comercial", agrega al respecto de los últimos acontecimientos.

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El análisis del cobro de dichos impuestos se da unas horas después de que Enrique Peña Nieto decidiera cancelar su visita a Washington D.C. para hablar de una renegociación del TLCAN con el nuevo presidente de Estados Unidos.

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