Flor de Espino (1925) Pelicula completa

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• published: 30 Nov 2013
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La más banal de las películas almacena entre fotograma y fotograma un testimonio vital de la sociedad de la época en la que fue rodada. Al cine balear le sobran los dedos de una mano para contar las cintas producidas en los inicios del séptimo arte. Se sabía de la existencia de Flor de Espino, realizada en 1925, pero la búsqueda por dar con el material había resultado infructuosa. Y llegó en carretilla, la de un veterano de la filmoteca que cargó los rollos de la película y permitió su recuperación. No pasará a la historia del cine, sus limitaciones son muchas y no destaca ni por el guión, la realización o la interpretación, pero su valor se multiplica como elemento testimonial de la sociedad y la Mallorca de la época. "Nos podemos preguntar si tiene sentido editar en DVD una película tan poco significativa, pobre en muchos aspectos, pero lo tiene por ser una producción hecha por gente de la Isla en los años 20, cuando el cine apenas había cumplido 30 años. Tiene además una vertiente antropológica, ya que es una mirada a aquella sociedad vista por la aristocracia. Muestra su ambiente, su ideología y el paisaje de una Mallorca muy diferente a la actual, destruida por la corrupción y la especulación. Sirve además para recuperar nuestra historia, el patrimonio cultural y cinematográfico", explica Vidal, director de la colección. Los responsables de Flor de espino conocían sus limitaciones y, con humildad, advertían al público desde su primera imagen: "Todos los intérpretes de esta película han prestado sus modestas facultades para un fin benéfico". Los actores eran aficionados de la burguesía que destinaban la recaudación a causas solidarias. El director Jaume Ferrer trabajaba como odontólogo y se confesaba un gran cinéfilo. Con esas premisas, Flor de Espino logró estrenarse el 25 de junio de 1925 en el Teatre Principal de Palma. Por dos reales, el público podía ver y leer las aventuras de Aina Delgado y Jordi Dezcallar Montis como la pareja protagonista, Anita y Jorge. Con un planteamiento muy teatral, la cinta adolece de un tono clasista y gira en torno al matrimonio concertado entre los hijos de una familia noble catalana y otra de terratenientes mallorquines. El señorito casadero quiere ver desde la barrera cómo es la mujer que le ha tocado en suerte, así que acuerda con su criado que le suplante frente a su futura familia política. Él, mientras tanto, adopta el rol del siervo y, durante el juego, se enamora de una criada. El hombre rico es el hombre pobre y Cupido ataca dónde no mandan los reales. El conflicto de clases está servido y la película camina por los terrenos del poder del amor y los obstáculos de la cuna. Los escenarios no son otros que las fincas, residencias rutales y casas de la alta burguesía mallorquina. La oportunidad perfecta para satisfacer la vanidad, mostrar lo que uno tiene, ser solidario y sentirse actor por unos días. Ahora reviven en DVD. 88 años después. (Escrito por MARCOS TORÍO)