Bandera de España 1785 e himno de Eduardo Marquina
En 1785 el rey
Carlos III para diferenciar los buques de guerra españoles de los de otras potencias donde gobernaban los Borbones, decide sustituir la bandera monárquica blanca por la rojigualda a través de un concurso de banderas.
En 1793
Carlos IV decidió ampliar el uso de dicha bandera a los arsenales y fuertes de la marina, tanto en
España como en los territorios de Ultramar.
Esta bandera, con el escudo simple de los reinos de
Castilla y León, usaba además los colores más representativos de los reinos de España: el carmesí de
Navarra,
León y
Castilla y el gualda y carmesí del reino de
Aragón.
Ondeó en plazas marítimas de
Nueva España , el
Perú,
Nueva Granada,
Río de la Plata, y en territorios como
La Florida,
Cuba,
Las Islas Filipinas... Fue arriada de innumerables fuertes con la independencia de las colonias del
Imperio Español. La última bandera con el escudo simple de 1785, en
América, se arrió en la
Habana el 1 de Enero de 1899, mientras que la última bandera "modelo 1785" arriada fue el 2 de Junio de 1899 en un pueblecito olvidado,
Baler o Valert, en las Filipinas donde durante 337 días había mantenido la guarnición española la defensa de la patria y la bandera.
Posteriormente el modelo 1785 siguió vigente -salvo el lapsus de la Primera
República, hasta el advenimiento de la
Segunda República en 1931, tras
145 años ondeando al viento.
¡
Gloria, gloria, corona de la
Patria,
soberana luz
que es oro en tu pendón!
¡
Vida, vida, futuro de la Patria,
que en tus ojos es
abierto corazón...!
Púrpura y oro: bandera inmortal
¡en tus colores juntas, carne y alma están!
Púrpura y oro: querer y lograr:
¡tú eres,
Bandera, el signo del humano afán!