En el mismo día en el que los republicanos se jugaban 57 delegados vitales para Trump, se publicaba también la primera gran encuesta nacional, que le daba una victoria a Donald Trump por delante de la demócrata Hilary Clinton. El prestigioso centro de estudios Rasmussen aseguraba que, por primera vez, el magnate ganaría a Hillary Clinton las presidenciales de noviembre con un 41% de los votos frente al 39% de los votos que conseguiría Clinton.
Podría darse la circunstancia de que dentro de veinte años, el terrorista de Daesh Salah Abdeslam, ya fuera de la cárcel quizá por su delación y colaboración con la justicia, aparezca por la Eurocámara para hablar de paz y de libertad, invitado por un grupo de eurodiputados, tan cretinos y amorales como los que hace unos días invitaron a otro hombre de paz, el exetarra Arnaldo Otegi.
Tal vez recuerden el mantra publicitario con el que una gran cadena de supermercados nos trataba de convencer de que "la calidad no es cara". La calidad no es cara ni barata. La calidad en un vino, a mi humilde entender, está íntimamente ligada a su elaboración, y por tanto el precio está relacionado con lo que al productor le cuesta hacer ese vino y le permite vivir de ello con cierta dignidad.
No nos engañemos, la sociedad se ha feminizado, pero el mundo laboral se ha endurecido hasta extremos insospechados debido a la fuerza del dato y la cultura de la rendición de cuentas sobre todo y en todo momento. Llamémoslos los valores baby-boomers que los de la generación X no se sintieron con autoridad para cuestionar y que ahora los millenial han puesto en la picota.
Pienso en los miles de niños como los nuestros, que están solos en los campamentos de refugiados, sin nadie que los cuide, ningún miembro de su familia, nadie que conozcan. ¿Quién los consuela cuando lloran? ¿Quién los viste cuando tienen frío y les da de comer cuando tienen hambre? ¿Qué estarán sintiendo? ¿Cuánto miedo deben tener? Son niños. Solo pensarlo me parece insoportable.
Si uno está atento a lo que se dice alrededor, la gente destaca la buena planta de Sánchez, sus intentos por formar gobierno, su serenidad, su educación y su inglés, su trato con Ciudadanos. Hasta entiende que no quiera apoyar a Mariano Rajoy. Pero esto no basta para cambiar el voto, aunque debiera bastar.
A partir de hoy 4 de mayo, tendré el privilegio de participar en el Women in Parliaments Global Summit 2016, que este año se desarrolla en Jordania. Un foro que reúne a parliamentarias de todo el mundo, proporcionando una oportunidad única de discutir los desafíos comunes y participar en un diálogo político que refleje la influencia y perspectivas mundiales de las mujeres que lideran los cambios políticos globales.
Lo intenta con la sonrisa guasona o irónica, pero no siempre le sale bien. Esa filigrana de puntuar los conceptos mediante gesticulación bucal es desigualmente interpretada según quienes sean los espectadores. Unos aprecian soberbia y complacencia, otros, complicidad inteligente; y sus enemigos, la sonrisa del lobo que no enseña todos los dientes.
Nunca me imaginé que la perdería tan pronto ni de esta manera. No podría haberme preparado para algo así. El destino se la llevó antes de que pudiera darme cuenta de lo que pasaba. Hace justo un año no se me habría ocurrido que pasaría el Día de la Madre sin la mía. Por favor, no dejéis que pase el tiempo sin reconciliaros con las vuestras.
Mi amor, la brutal película de Maïwenn Le Besco, refleja brillantemente la degradación de esas personas que se ven atrapadas en historias de amor tóxico. Y a veces, ese infierno, el de la mujer atrapada en esta historia, casi parece una película de terror.
Como acostumbra a decir el presidente de Asturias, Javier Fernández, no hay vieja y nueva política, sino buena y mala. Y la ejercida por Sánchez no ha sido la más conveniente para que el PSOE vuelva a ser partido de gobierno. Lejos de reportar un sólo voto o mejorar su valoración en las encuestas, las negociaciones con las que ha ocupado el centro de la escena en busca de una investidura no han frenado la caída del socialismo.
Hay un sector de la progresía occidental que se ha convertido en un aliado perfecto del machismo benevolente, considerando a la mujer como un ser prácticamente sacrosanto y virginal, elevando la maternidad hasta cotas tan altas que casi rozan con las de la Iglesia Católica.
España vivió uno de sus momentos más convulsos cuando estaba acabando la dictadura de Franco y el príncipe Juan Carlos se preparaba para sustituirle. De todo esto se habla en El dosier del Rey, un libro que refleja que tan cierto como que Juan Carlos se apoyó en la CIA y en su Gobierno para alcanzar el poder, lo fue que llegado el caso les mintió para conseguir introducir en la Transición elementos a los que se oponían los estadounidenses.
El Gobierno presentó programas para las niñas que vivían en el campo, las trabajadoras del hogar, las prostitutas y para aquellas que habían dejado el colegio antes de graduarse. Desde mediados de la década de los 90, el índice de admisión escolar se ha mantenido en un 99% tanto para chicos como para chicas.
Anna Martínez-Millán es graduada en Antropología Social y Cultural y Máster en Investigación en Educación con especialidad en Desigualdades, Investigación y Acción educativa. Especializada en antropología de la educación, infancia y migraciones desde 2014, forma parte de la junta directiva de Kali Zor, asociación gitana activista y de intervención social de Badalona, donde desempeña tareas de comunicación, redacción y coordinación de proyectos europeos.
¿Cómo entrenan los investigadores de la Inteligencia Artificial a los ordenadores para leer y extraer información de documentos escritos? ¿Cómo consiguen que realicen análisis automáticos de textos? La clave está en el lenguaje, el mecanismo de entrada de datos más importante y eficiente de los seres humanos.
¿Aburrido de hacer los mismos ejercicios de pilates? En esta clase de pilates, Karol Tamayo nos mostrará de qué manera podemos transformar los ejercicios que se hacen en pilates máquinas, para poder hacerlos en la colchoneta aprovechando todos los beneficios del movimiento y conseguir una práctica diferente e innovadora.
El modelo de relación de dominación-sumisión no es válido en el siglo actual. Los padres igualitarios o padres cuidadores sienten una profunda soledad. Carecen de referencias en las que mirarse. Sin modelos sociales, sin aplausos familiares, sienten que pisan un terreno de arenas movedizas por el que no saben bien cómo moverse.
Al igual que Dinamarca, muchos otros países europeos han ido realizando cambios en sus políticas para hacerlas más estrechas de miras, con la intención de favorecer más a los intereses del propio país que a los compromisos con Europa para llegar a una solución común.