Continúa el conflicto en Acindar: Villa en marcha
Por Indymedia Rosario -
Saturday, Jul. 11, 2015 at 3:50 PM
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El pasado viernes se realizó una movilización en Villa Constitución en el marco del reclamo por la reincorporación de doce obreros despedidos. Las negociaciones siguen trabadas en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, aunque la última reunión contó con un nuevo actor: la cartera nacional de Trabajo. Con cuarto intermedio hasta el jueves 16, la patronal y los despedidos se verán el día lunes, a pedido de los últimos.
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Con el inicio de este mes, estalló un nuevo conflicto en Acindar. El mismo, a la vista externa como intempestivo, trae cola. Los metalúrgicos afiliados a la Unión Obrera Metalúrgica de Villa Constitución, habían iniciado a fines de junio una serie de medidas por el incumplimiento del acuerdo salarial y en reclamo por el impuesto a las ganancias. En el medio, hubo elecciones de delegados y comisión interna. Según relatan los obreros quince minutos después de oficializar la nueva comisión interna, la empresa deja caer los contratos de cinco precarizados con cuatro años y medio de antigüedad.
Aunque criticable en muchos aspectos, la empresa tiene el derecho legal a prescindir de los obreros que no son de planta al concluir con contratos. Pero el eje de discusión inicial fue que, al ser buena parte de ellos empleados que se desempeñaban en el sector de colada contínua y a la par de los empleados de planta permanente, se incurría en un riesgo laboral por falta de personal. Dicho sector maneja acero en estado líquido y, según indicaron los empleados, por normativas de seguridad e higiene, se precisa determinada cantidad de personal para llevar adelante esa parte del proceso de producción.
Entonces, si la empresa no estaba dispuesta a arriesgar la vida de sus empleados en colada, donde dicho sea de paso hubo numerosos accidentes de diversa gravedad,iba a tener que incorporar personal. Entonces, los precarizados con cuatro años de antigüedad debían ser los 'candidatos naturales' por vinculación y experiencia. Además, por convención establecida entre obreros y patrones.
Lo que sucedió es que al conocerse estas cinco desvinculaciones a la que se sumaba una sexta de otro empleado al que se le caía el contrato a los pocos días, los reflejos de los metalúrgicos fueron veloces y en asamblea al mediodía del miércoles 1° de junio, definieron parar. Ante esto Acindar impidió el ingreso a tres empleados de planta permanente al turno tarde y repitió la acción con otros tres al turno noche. No hubo comunicación ni telegramas: simplemente se les impidió el ingreso, dejando en una nebulosa a seis obreros de planta permanente, algunos de ellos con hasta 10 años de antigüedad, familia y según indican sus compañeros, todos de una conducta laboral intachable dentro de planta.
El domingo siguiente, Acindar, parte del grupo ArcelorMittal, sacó una solicitada en Diario La Capital, en la que con narrativa más similar a una carta de divorcio que a una desvinculación laboral, esgrime vagamente sus argumentos para desvincular a obreros que, reiteramos, formalmente no están despedidos.
"Hemos cometido errores a lo largo de nuestra historia y continuamente aprendemos de ello. Mirar para atrás nos ha enseñado a respetar el diálogo por sobre la soberbia, a valorar, entender y respetar la historia y el sentir de Villa Constitución. Con este espíritu encaramos todos los días nuestro trabajo. Valorando a aquellos que se esfuerzan y contribuyen a que seamos mejores cada día, dialogando y escuchando las opiniones diferentes en un marco de entendimiento y respeto. Dando nuevas oportunidades a quienes se equivocan pero siendo concientes y asumiendo la enorme responsabilidad de administrar una industria que sostiene a centenares de familias. Esto nos obliga muchas veces a tomar desiciones difíciles", dice uno de los párrafos más notables de la solicitada.
Vale recordar que los "errores" mencionados, pueden incluir en el caso de Acindar desde haber sido el laboratorio de la dictadura genocida, sede de un centro clandestino de detención, entregadora de listas de obreros combativos, responsable de detenciones y secuestros en coordinación con las fuerzas represivas y haber aportado a la dictadura de Videla al Ministro de Economía, José Alfredo Martínez de Hoz. Martínez de Hoz fue presidente de la empresa y procesado por ser considerado responsable de secuestros y desapariciones y fue el responsable de la cartera económica del gobierno militar. "En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada", decía la Carta Abierta a la Junta Militar de Rodolfo Walsh. También los "errores" pueden ser los miles de despidos en el año 1991, que quedaron grabados a fuego en la memoria de Villa o las cientos de desvinculaciones en el 2001, durante la crisis. Tal vez, alguna explosión, muertos o quemaduras en el lugar de trabajo, también sean incluidos en el listado. Tal vez.
Lo cierto es que el cinismo de esta patronal llega hasta estos días con esta figura nebulosa del despido encubierto mediante licencias especiales. Ni despedido, ni trabajando: de licencia mientras discuto la desvinculación, sería la política de Acindar.
Ante los despidos, la reacción fue el paro. En un principio apareció la posibilidad de que todo esto sea parte de una maniobra de la empresa para apretar al gobierno por el ingreso de acero chino al país, en un marco de sobre producción mundial que afecta las ventas locales. También circuló que podría ser una estrategia para hacer una parada necesaria en el marco de la crisis gasífera que sufre el país, sin mencionarla en un año de elecciones nacionales.
Pero en el Ministerio la empresa habla de otra cosa, también en su expresión pública mediante la solicitada: la contracción al trabajo, la unidad en los objetivos, el cuidar el trabajo despidiendo obreros, son parte de los argumentos de alto voltaje cínico que expresa la patronal que, según denuncian los empleados, lleva dos años intentando aplicar políticas de ajuste para incrementar la productividad.
Ahora bien, ArcelorMittal no está sola en la jugada. Cristóbal López, el reconocido empresario kirchnerista, salió recientemente a dar aviso de que si en septiempre Paraná Metal no recibía nuevos trabajos para producir, cerraría sus puertas. Sería ¿el cuarto? cierre de la ex Metcon, que en 2007 empleaba un millar de obreros y con la intervención de López se quedó con 140. No salió gratis la reducción: recientemente un empleado murió aplastado en la planta villense.
Así las cosas, otra verdad es que Acindar tiene dictada conciliación obligatoria desde el martes pasado. Los obreros la acataron, pero la patronal no: reingresaron dos de los contratados desvinculados, pero no los otros 4 y, los 6 efectivos permanecen con un régimen de licencia especial dictado unilateralmente por la patronal. Acindar, entonces, te negocia los despidos no formalizados, pero con los obreros afuera, violando el precepto de la conciliación, que retrotrae la situación al momento anterior al conflicto: es decir, todos trabajando.
El lunes por pedido de los obreros habrá reunión con la patronal. En tanto en lo formal, la conciliación dictada por 15 días hábiles pasó a un nuevo cuarto intermedio para el jueves de esta semana. Por lo pronto Villa va despertando y marcha pese al cielo gris y neblinoso, defendiendo nuevamente los derechos de los trabajadores, levantando su mandato histórico.
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