Afganistán, territorio del cual únicamente conocemos una espesa tiniebla de drama y terror, al vivir desolados bajo la condena de una guerra que parece injustificada y de la cual desconocemos su fin.

Algunos en su momento fueron partidarios de la invasión norteamericana a este país. Hoy en día, aquellos que fueron reacios dudan de la credibilidad y de las razones que desataron uno de los peores conflictos bélicos de toda la historia, y más con el análisis de gente como Juan Cole, quien recientemente enlistó 10 mitos acerca de la vida actual en Afganistán. En De10.mx te presentamos su punto de vista.

1. Ha habido progreso en el freno de grupos insurgentes. La realidad es que diversas ONG's, han dicho que la población apoyaba los crudos sucesos que acontecían en su país, así como el desvío de fondos económicos para combatir con este mal, los cuales resultaron ser mentiras. De igual manera, varios organismos internacionales temen que en ciertas regiones, los grupos talibanes vuelvan a resurgir con mayor fuerza.

La realidad es que la población civil de aquel país, espera que pronto cese el conflicto bélico, y darle paso a esa nueva vida, llena de paz, la cual anhelan. Esto ha quedado respaldado con diferentes estudios realizado por la ONU y la OTAN.

2. Los afganos quieren que las tropas extranjeras permanezcan en su territorio pues se sienten protegidos. Aunque el gobierno de los Estados Unidos dijo de manera oficial que sus cuerpos militares estarán en Afganistán hasta el 2014, pues con esta medida pretenden ayudar a la reconstrucción del país, la verdad es que los habitantes dicen sentirse no muy seguros con su presencia, y prefieren que adelanten su retirada. De hecho, una encuesta realizada por diversos periódicos de Estados Unidos, demostró que sólo un 32 por ciento apoyan el hecho de su permanencia.

La mayoría de la población dicen tener un cuerpo policial y militar preparado para combatir cualquier amenaza de los talibanes, y no creen que en realidad exista una ayuda desinteresada por parte de los países extranjeros, como lo explican en este video encontrado en dailymotion.com.

3. Estados Unidos está ejerciendo presión a los grupos talibanes para negociar. En un principio se dijo que al redoblar los ataques aéreos de Estados Unidos sobre Afganistán, se obligaría a que los grupos radicales se sentaran en la mesa de diálogo. Esto no ha sucedido así y aunque ha habido intentos por negociar, no han sido efectivos.

Es hasta ahora, tras la muerte de Osama Bin Laden, que el presidente Barack Obama ha declarado abiertamente querer entablar diálogo y así, encontrar la mejor solución para dar término a este conflicto.

4. Los ataques del 11 de septiembre de 2001 justifica la presencia de los Estados Unidos en Afganistán. Lo ocurrido hace casi una década en Nueva York es el escudo protector, con el que algunos estadounidenses, van por la vida diciendo que lo que hacen en Afganistán tiene un verdadero por qué. Lo curioso de esto es que la mayoría de los pobladores, hasta hace no mucho, no sabían prácticamente nada de aquel trágico suceso, e incluso, les mostraron videos de la tragedia para que estuvieran enterados y comprendieran del por qué de la ocupación de su territorio.

5. Los afganos, a pesar de su descontento, quieren a las tropas norteamericanas. Una mentira más, pues un poco más del total de los afganos piden que estas abandone el país lo más pronto posible, y además al no ver respuesta, ha aumentado el apoyo de los ataques de grupos talibanes de un 9 a un 27 por ciento.

6. Existió limpieza en las elecciones de 2009 y 2010, por lo que se tienen las bases de un gobierno legítimo. Con el tiempo, salió a la luz que el proceso por el cual fue electo como presidente, Hamid Karzai, estuvo empañado por el fraude. Uno de cada cuatro votos tuvo que ser retirados del conteo final por actos un tanto sucios.

7. Hamid Karzai es un aliado más de los Estados Unidos. Esta afirmación dista mucho de la realidad, ya que el mandatario afgano en innumerables ocasiones ha dicho que preferiría aliarse con un grupo talibán, antes de negociar con algún personaje norteamericano.

8. Los grupos radicales iraníes son quienes fortalecen y apoyan a los talibanes. Según algunas investigaciones e incluso información obtenida, gracias a los cables de Wikileaks, esto quedo más que descartado, pues la actividad fronteriza entre estos dos países es prácticamente nula.

9. Los extranjeros son los responsables de la corrupción. Poco a poco se ha ido comprobando que este problema, en realidad, es causado por los negocios sucios relacionado con el gobierno de Karzai y gente allegada al mandatario.

10. Estados Unidos está en Afganistán para eliminar a Al-Qaeda. Según informes de la CIA, en Afganistán existen no más de 100 células de este grupo terrorista. En realidad con quienes quieren acabar, es con Gulbuddin Hekmatyar y la red de Jalaluddin Haqqani, que en los 80, fueron aliados en contra de los soviéticos.

Desafortunadamente el conflicto bélico que azota a ese país, desde hace más de 10 años, no permite que el resto del mundo se entere de la riqueza que en verdad alberga.

Afganistán en efecto, es uno de los países más ricos en cuanto etnias y culturas se refiere. Está dividido en 34 provincias que limitan con Pakistán, Irán, Turkmenistán, Uzbekistán, Tayikistán y China. En su territorio predominan las montañas y los desiertos.

Algunos de los focos turísticos de esta región, según guiaviaje.billetes.com, son:

Mazar-e-Sharif. Se encuentra al norte de Afganistán y es atractivo para el visitante, ya que su territorio alberga una gran riqueza arqueológica, como la gran mezquita azul, mejor conocida como el "noble sepulcro".

Afortunadamente, la guerra no le ha hecho ningún daño, permanece de pie e intacta. En ella se aprecian los vestigios de la mezcla musulmana y de los helenos.

Herat. En esta pequeña ciudad es posible apreciar construcciones antiguas, como la mezquita Masjet-e-Jam, principal atractivo de esta localidad, debido a su gran decoración a base de azulejos y mosaicos; así como el complejo Musallah y la tumba del poeta Jami.

Budas de Bamiyan. Se dice que Bamiyan es la zona más segura de Afganistán. Durante años fue uno de los principales destinos turísticos, ya que ahí se encontraban dos estatuas de budas, talladas en piedra, de más de 30 metros de alto, que datan de los siglos V y VII. Sin embargo, los ataques talibanes acabaron con ellas, y hoy sólo puede apreciarse las siluetas y pequeños detalles de las mismas.

Jardines de Babur. En Kabul, la capital afgana, se encuentra este sitio que fue mandado a hacer bajo las órdenes del emperador mogol Babur, por ahí del siglo XVI. Como otros de los destinos turísticos, la guerra ha dejado sus estragos en este lugar y en la actualidad, existen diversas asociaciones civiles, que pretenden regresarles la vida, encargándose de su reconstrucción.

Minarete de Jam. Tiene sus orígenes en el siglo XII y es considerados como una de las máximas muestras de lo que es el arte islámico del oriente. Se encuentra en el distrito de Shahrak, en la provincia de Gawr.

Tiene 65 metros de altura y está construido con ladrillo y cal, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y tiene algunos decorados, ornamentaciones e inscripciones. Está rodeada de otra decena de ruinas arqueológicas.