Sherlock Holmes, personaje ficticio creado en 1887 por Sir Arthur Conan Doyle, es un «detective asesor» en el Londres de finales del siglo XIX, que destaca por su inteligencia, su hábil uso de la observación y el razonamiento deductivo para resolver casos difíciles. Es protagonista de una serie de 4 novelas y 56 relatos de ficción, que componen el «canon holmesiano», publicados en su mayoría por The Strand Magazine.
Sherlock Holmes es el arquetipo de investigador cerebral por excelencia e influyó en gran medida en la ficción detectivesca posterior a su aparición. Aunque podemos considerar a Auguste Dupin, creado por Edgar Allan Poe, como un personaje predecesor muy similar,[1] la genialidad excéntrica de éste no alcanzó la enorme popularidad que Holmes y su autor alcanzaron en vida de éste.[2]
[editar] Descripción
Estatua de Sherlock Holmes en Picardy Place en
Edimburgo, lugar de nacimiento de Conan Doyle.
Sherlock Holmes, que en un principio Doyle tenía previsto llamar Sherrinford,[3] es un detective privado, alto, delgado, frío, irónico, ingenioso e intelectualmente inquieto. Su compañero, amigo y cronista el Dr. Watson, con quien nunca llega a tutearse ( se llaman por el apellido) lo describe físicamente del siguiente modo al poco de conocerse:
Su estatura sobrepasaba los seis pies, y era tan extraordinariamente enjuto, que producía la impresión de ser aún más alto. Tenía la mirada aguda y penetrante, [...] y su nariz, fina y aguileña, daba al conjunto de sus facciones un aire de viveza y de resolución.
En ocasiones resulta un tanto brusco, pero es cortés con las mujeres a pesar de que desconfía de ellas. El Dr Watson resalta en uno de sus casos la presencia de una bella dama llamada Irene Adler, que chantajea al rey de Bohemia (en las obras de Sherlock Holmes se ve una geopolítica paralela, se nombran reyes, como el de Escandinavia u otros...), la cual es considerada siempre por Sherlock como «la Mujer». A sus ojos, ella rivaliza con él mismo en inteligencia, como demuestra en una de sus aventuras.
Y así fue como se evitó un gran escándalo que pudo haber afectado al reino de Bohemia, y cómo los planes más perfectos de Sherlock Holmes se vieron derrotados por el ingenio de una mujer. Él solía hacer bromas acerca de la inteligencia de las mujeres, pero últimamente no lo he oído hacerlo. Y cuando habla de Irene Adler o menciona su fotografía, es siempre con el honroso título de «la» mujer.
No es muy ordenado en la rutina cotidiana, es muy habilidoso disfrazándose, fuma en pipa, le gustan las galletas, toca el violín (un Stradivarius, a menudo a horas poco adecuadas) con maestría, es un experto apicultor, excelente boxeador, tiene un gran conocimiento científico, en especial en química, y, cuando se aburre por falta de los retos intelectuales que suponen sus casos, consume cocaína en una solución al 7% (esto sólo se menciona en el libro El signo de los cuatro, publicado en 1890), la cual deja gracias a la insistencia de Watson, con quien vive hasta finales del siglo XIX en el número 221B Baker Street, en Londres.
Sherlock Holmes tiene un hermano siete años mayor, Mycroft Holmes, que posee una capacidad de observación y de deducción mayores que las suyas, pero es incapaz de aplicar sus habilidades a una actividad detectivesca, ya que no tiene ni ambición ni energía. Es miembro y cofundador del Club Diógenes, y es mencionado en cuatro historias de Sherlock Holmes: El intérprete griego, El problema final, La casa vacía y Los planos del Bruce-Partington. El problema es que Mycroft carece de sentido práctico, lo que se ve claramente en El intérprete griego, donde su titubeante aproximación al caso casi le cuesta la vida a su cliente. En la historia de Los planos del Bruce-Partington Holmes revela a Watson que su hermano Mycroft, aunque no conste, ocupa un cargo importantísimo en el gobierno británico hasta el punto que, como dice Holmes, «no mentiría si digo que a veces el gobierno es él».
El primer caso en el que Sherlock interviene de joven, según le cuenta a Watson, es en la aventura de La corbeta Gloria Scott (1893), en la cual ayuda a un amigo a descifrar un mensaje codificado.
Doyle basó el método deductivo de su personaje en el proceder de uno de sus profesores en el Edinburgh Royal Infirmary, donde estudió medicina, Joseph Bell.
Aunque muchos han negado esta opción, el escritor basó su descripción de Holmes en un antiguo amigo de la facultad, llamado Sherrinford, el cual llegó a formar parte de Scotland Yard, aproximadamente hacia el año 1844 y gran amigo y aliado de Conan Doyle y cuyas descripciones de vivencias policíacas inspiraron muchas de sus obras.[1]
Ateniéndonos a las pautas de textos de Doyle, Sherlock Holmes nació el 6 de enero de 1854. Su padre era un hacendado inglés y su madre descendía de una estirpe de pintores franceses. Tiene un hermano, Mycroft, que gracias a las portentosas facultades para gestionar ingentes cantidades de información que posee, trabaja casi anónimamente como coordinador general e informador interno de los asuntos del gobierno británico.
Sherlock Holmes parece haber sido estudiante en la universidad, probablemente la de Oxford, pero sin duda no Cambridge. Tras su graduación, se aloja cerca del Museo Británico para poder estudiar las ciencias necesarias para el desarrollo de su carrera posterior. Conoce a Watson en 1881, en el hospital Saint Bartholomew. Rehúsa el título de sir, pero acepta la Legión de honor.
Su gran enemigo, también de extraordinarias facultades intelectuales, es el profesor Moriarty, quien llegó a acabar aparentemente con la vida del eminente detective en la cascada de Reichenbach, Suiza (La aventura del problema final). Doyle tuvo que optar por resucitar a su héroe cuando miles de lectores protestaron llevando crespones negros en el sombrero en señal de luto. Sherlock Holmes reaparece en el caso La casa vacía (La reaparición de Sherlock Holmes, 1903).
Tras una carrera de 23 años, de los que Watson compartió 17 con el, Holmes se retiró a Sussex, donde se dedicó a la apicultura, y llegó a escribir un libro titulado Manual de apicultura, con algunas observaciones sobre la separación de la reina, y también, casi casualmente, resolvió uno de sus casos más complicados: La aventura de la melena del león (1907). Posteriormente a su jubilación como detective se dedicó dos años a preparar concienzudamente una importante acción de contraespionaje poco antes del inicio de la Primera Guerra Mundial. Nada más consta sobre él a partir de 1914.
[editar] Conocimientos y habilidades
Clásico atuendo de Sherlock Holmes
En la primera historia, Estudio en escarlata, se brinda un cierto trasfondo de Holmes. A principios de 1881, se presenta como un estudiante independiente de química con una variedad de intereses muy curiosa, casi toda la cual le sirve en la resolución de crímenes. En una de las primeras historias, La corbeta Gloria Scott, el padre de un amigo del colegio lo felicita por sus habilidades deductivas y el propio Holmes explica que ello fue una de las razones por la que se convirtió en detective.
"— Mr. Holmes, but it seems to me that all the detectives of fact and of fancy would be children in your hands. That's your line of life, sir, and you may take the word of a man who has seen something of the world."
— And that recommendation, with the exaggerated estimate of my ability with which he prefaced it, was, if you will believe me, Watson, the very first thing which ever made me feel that a profession might be made out of what had up to that time been the merest hobby. |
«— Sr. Holmes, pero me parece que todos los detectives de realidad o de ficción no serían más que niños en sus manos. Esa es su línea de trabajo, señor, y puede creer en la palabra de un hombre que ha visto algo de mundo».
— Y esa recomendación, con la exagerada estimación de mis facultades que la precedió, fue, puede creerme, Watson, lo primero que me permitió ver que una profesión podía surgir de lo que hasta entonces yo veía como una mera afición. |
La corbeta Gloria Scott.
[6]
Holmes siempre usó métodos científicos (o supuestamente científicos) y se centra en los métodos de la lógica y los poderes de observación y deducción. Es un personaje excéntrico y siempre sigue siendo objetivo. Él sólo nos revela las cosas poco a poco. En Estudio en escarlata, Watson se muestra sorprendido del desconocimiento que tiene Holmes de la teoría heliocéntrica demostrada por Nicolás Copérnico en el siglo XVI:
Sin embargo, mi sorpresa alcanzó el punto culminante al descubrir de manera casual que desconocía la teoría de Copérnico y la composición del sistema solar. Me resultó tan extraordinario el que en nuestro siglo XIX hubiese una persona civilizada que ignorase que la Tierra gira alrededor del Sol, que me costó trabajo darlo por bueno.
Más aún cuando justo después de ello Holmes le asegura que «ahora que lo sabe, intentará olvidarlo», aludiendo a que cree que el cerebro es limitado en cuanto a la capacidad de información que puede retener, y que por ello «es de mayor importancia que los datos inútiles no desplacen a los útiles». A raíz de esto, el doctor Watson decide evaluar las habilidades de Holmes, calificándolas de este modo:
- Literatura. — Cero. (Sin embargo en "El signo de los cuatro" cita a Goethe y a La Rochefoucault, además de mostrar su conocimiento del escritor Jean-Paul).
- Filosofía. — Cero.
- Astronomía. — Cero.
- Política. — Ligeros.
- Botánica. — Desiguales. Al corriente sobre la belladona, opio y venenos en general (puede distinguir el lugar de cultivo de la planta, día y tiempo de consumo estudiando una colilla de cigarro). Ignora todo lo referente a los cultivos prácticos y jardinería.
- Geología. — Conocimientos prácticos, pero limitados. Distingue de un golpe de vista las clases de tierras. Después de sus paseos por Londres puede debido al color y consistencia definir de que parte de toda la ciudad es cada una de las manchas de barro en su pantalón.
- Química. — Conocimientos profundos.
- Anatomía. — Exactos, pero no sistemáticos.
- Literatura sensacionalista. — Inmensos. Parece conocer con todo detalle los crímenes perpetrados en el siglo XIX.
- Música. — Toca bien el violín.
- Combate. — Experto boxeador y esgrimista de palo y espada. (Sin embargo, en La aventura de la casa deshabitada, de 1901, Sir Arthur Conan Doyle menciona que Holmes tenía algún conocimiento de «baritsu», refiriéndose al bartitsu, arte marcial ecléctico enfocado a la defensa personal que fue desarrollado en Inglaterra entre 1898 y 1902).
- Leyes. — Tiene conocimientos prácticos de la leyes británicas.[8]
Sin embargo, el doctor Watson realizó esta calificación al poco de empezar a vivir con Holmes y, como se demuestra posteriormente, el detective posee conocimientos sobre, por ejemplo, Astronomía. Esto se puede observar en El ritual de los Musgrave (donde Holmes habla de conseguir la ecuación personal, como lo llaman los astrónomos), en La aventura de los planos de Bruce-Partington (compara la visita que les hace Mycroft Holmes al 221B de Baker Street con un planeta abandonando su órbita) y en El intérprete griego (Holmes charla sobre las causas de los cambios en la oblicuidad de la Eclíptica).
Sherlock Holmes y el doctor
John H. Watson; ilustración para el
Strand Magazine (1893).
La amplia bibliografía de Arthur Conan Doyle en la que se relatan las aventuras de Sherlock Holmes y su compañero Watson, conocida en su conjunto como «canon holmesiano», consta de cuatro novelas y cincuenta y seis relatos recogidos en varios tomos:[9]
[editar] Colecciones de relatos
La mayoría de las aventuras y relatos de Sherlock Holmes están narradas por su amigo el doctor J. H. Watson, a excepción de seis relatos en particular. La aventura de la melena del león y La aventura del soldado de la piel descolorida están narrados por un narrador protagonista, ya que es Holmes quien cuenta lo sucedido desde su perspectiva, o sea, la de personaje principal de los relatos. La piedra preciosa de Mazarino es una de las últimas experiencias del afamado detective, y está narrada por un narrador omnisciente al igual que Su último saludo en el escenario. Tanto La corbeta Gloria Scott como El ritual de los Musgraves son casos policiales anteriores a la asociación entre el doctor Watson y el señor Sherlock Holmes, en ellas se deja ver que, a pesar de que Watson las escribió, fue Holmes quien se las contó a título anecdótico de sus primeros tiempos como detective. El resto de sus aventuras y relatos sí fueron narrados por el doctor John H. Watson.
Sherlock Holmes siempre criticaba a su compañero de aventuras porque, según Holmes, en sus relatos, los hechos significativos se mezclaban con detalles que, al ser innecesarios, distraen de los detalles objetivos que llevan a la resolución del caso. Sin embargo, en cuanto se ve él mismo en la tesitura de redactar sus aventuras, reconoce que el asunto tiene sus dificultades y que tal vez juzgó con demasiada severidad la redacción «florida» de Watson.
[editar] Sherlock Holmes como icono popular
Sherlock Holmes ha sido llevado muchas veces al cine y al teatro y también aparece en novelas, relatos, historietas, dibujos animados y series de televisión, con los más diversos grados de fidelidad al espíritu del personaje que es ya todo un icono de la cultura popular.
Entre los actores más aplaudidos se encuentran Basil Rathbone quien, con Nigel Bruce, constituyeron el icono referencial en el ámbito del cine; Peter Cushing, Robert Stephens y Jeremy Brett, quizás el mejor Sherlock Holmes de la pequeña pantalla debido a su grado de fidelidad en Las Aventuras de Sherlock Holmes.
Entre las historietas, destacan versiones cómicas como las españolas Las extrañas aventuras de Sherlock López y Watso de Leche (1943) de Gabriel Arnao Crespo o Sir Tim O'Theo (1970) de Raf.[10] También apareció brevemente en el 50 aniversario de Detective Comics (número 572, agosto de 1980) junto a Batman, el personaje más popular de la publicación (y cuyo método deductivo guarda a veces similitudes con el personaje de Conan Doyle).
En cuanto a las novelas, Sherlock Holmes vuelve a aparecer como personaje secundario en la saga Sherlock Holmes y los Irregulares de Baker Street. Las novelas, escritas por Tracy Mack y su esposo Michael Citrin, se centran en el grupo de huérfanos (Los Irregulares de Baker Street), quienes ayudan a Holmes en varias de las novelas originales.
Recientemente, este personaje ha sido tomado como gran fuente de inspiración en la serie televisiva estadounidense House, sobre el irreverente doctor del mismo nombre, especialista en diagnóstico médico. Holmes no sólo comparte con House parecido en el nombre, sino también su personalidad genial y unos métodos muy similares a la hora de resolver sus casos. Como un guiño a los espectadores, los guionistas alojan al Dr. House en el 221B, también comparte la dependencia a las drogas (Vicodine/cocaina al 7%). Su mejor amigo Wilson, también comparte similitud en el nombre con Watson...
En diciembre del 2009 se estrenó la nueva película sobre las aventuras de Sherlock Holmes dirigida por Guy Ritchie y que cuenta con la participación de Robert Downey Jr. (Holmes), Jude Law (Watson) y Rachel McAdams (Adler).
En 2010, la BBC produjo una miniserie de tres episodios sobre Sherlock Holmes, titulada Sherlock aunque ambientada en la actualidad.[11] La miniserie cuenta con la participación de Benedict Cumberbatch como Sherlock Holmes, y Martin Freeman como Watson.[12] La primera temporada de la miniserie consta de tres episodios, al igual que la segunda, emitida en enero de 2012.
[editar] Curiosidades
|
Las secciones de curiosidades deben ser evitadas.
Puedes mejorar este artículo introduciendo la información útil de esta sección en el resto del texto y quitando los datos inapropiados. |
- La célebre frase «Elemental, mi querido Watson» ("Elementary, my dear Watson") no aparece en obra alguna de Conan Doyle sobre Sherlock Holmes.[13] Se suele creer que aparecía en una de las historias cortas de El jorobado (The Crooked Man, en las Memorias de Sherlock Holmes), pero en el original en inglés, así como en algunas traducciones, la palabra «elemental» y la frase «mi querido Watson» aparecen por separado.
- Otras frases de las cuales pueden también derivar estas famosas palabras del detective, son:
— "Interesting, though elementary," said he as he returned to his favourite corner of the settee. "There are certainly one or two indications upon the stick. It gives us the basis for several deductions."
— "Has anything escaped me?" I asked with some self-importance. "I trust that there is nothing of consequence which I have overlooked?"
— "I am afraid, my dear Watson, that most of your conclusions were erroneous. [...] |
— «Interesante aunque elemental», dijo [Sherlock Holmes] mientras regresaba a su rincón favorito, donde se hallaba el sofá. «Ciertamente hay dos o tres indicios en el bastón. Nos da las bases para varias deducciones».
— «¿Se me ha escapado algo?», le pregunté dándome ciertos aires de importancia. «¿Acaso hay alguna minucia inconsecuente de la que no me haya percatado?»
— «Me temo, querido Watson, que la mayoría de sus conclusiones son erróneas». [...] |
El sabueso de los Baskerville.
[14]
- El sombrero de cazador de gamos característico del detective nunca se menciona en la obra de Doyle: Es un añadido del ilustrador de The Strand Magazine Sidney Paget, que, además, utilizó a su hermano Walter como modelo para representar el aspecto de Holmes.
- La pipa meerschaum, propia de la iconografía de Sherlock Holmes, no apareció hasta que fue utilizada en una dramatización de teatro de uno de los relatos en la década de 1920.
- La novela de El sabueso de los Baskerville, lleva la narración un tiempo 8 años anterior, debido a las cartas recibidas por Doyle que pedían un regreso del personaje al haber fallecido este en el relato El problema final.
- Cuando Doyle falleció, su residencia en Londres fue convertida en el 221B de Baker Street. El edificio pertenece a una empresa (la cual, muy amablemente, contesta y conserva todas las cartas que diariamente recibe para Mr. Holmes, y ha llegado a publicarlas).
- Antes de que se publicara la primera novela de Sherlock Holmes titulada Estudio en escarlata, Conan Doyle tuvo que pedirlo varias veces hasta que con el título antes mencionado el editor se dispuso a publicar la novela.
- La primera película sobre Holmes es una película muda que dura 30 segundos y se titula Sherlock Holmes Baffled.
- En la película Basil el raton superdetective, en una escena se ve la sombra de Sherlock Holmes y de otro hombre que posiblemente es Watson. Además, en esa película, el protagonista es un ratón que llaman "Basil de la calle Baker", la calle Baker es la calle donde vivía Sherlock Holmes con Watson. En cuanto al nombre Basil, se debe al actor Basil Rathbone, el primero en interpretar a Holmes en películas sonoras.
- El manga y anime Detective Conan tiene mucha referencias a Sherlock Holmes, tales como el nombre del protagonista (en referencia a Arthur Conan Doyle) o el ficticio distrito Beika, referente a la calle Baker ademas, en diferentes casos los asesinos tienen como referencia citas de dichos relatos de Doyle .
- En el anime Tantei Opera Milky Holmes, la protagonista Sherlock “Sheryl” Shellingford es un homenaje a Sherlock Holmes, asi como sus 3 amigas, tambien basados en famosos detectives de la ficcion.
- En el anime Hidan No Aria, la protagonista Aria Holmes Kanzaki, tiene referencia a Sherlock Holmes con el apellido "Holmes" y se indica que la protagonista proviene de la familia del detective, siendo la cuarta generación de Holmes.
[editar] Sherlock Holmes y los escritores
Muchos autores han dedicado líneas al célebre detective.
- Borges escribió a propósito de su admirado personaje inglés:
No salió de una madre ni supo de mayores.
Idéntico es el caso de Adán y de Quijano.
Está hecho de azar. Inmediato o cercano
lo rigen los vaivenes de variables lectores. [...]
Pensar de tarde en tarde en Sherlock Holmes es una de las buenas costumbres que nos quedan. La muerte y la siesta son otras. También es nuestra suerte convalecer en un jardín o mirar la luna.
- Emilio Pascual, director de Cátedra, poco antes de cerrar la edición de las obras completas de Sherlock Holmes, recibió un poema anónimo. Se sospecha que el autor puede ser un conocido autor modernista, sin embargo, se desea respetar el deseo del escritor (y de sus herederos) de permanecer incógnito y se acepta con agrado infinito su particular homenaje a Holmes y Watson:
No hay nada elemental, sólo la muerte
merece algún respeto:
la vida es tal recurso de la suerte,
que un fracaso es un reto. Así que, amigo mío, no lamente
descubrir el secreto:
el tiempo aquí no sirve, sea valiente,
que yo soy su amuleto. Y no se quede ahí mirando todo,
buscando explicaciones:
se respira mejor desde aquí fuera. No hay nada elemental ni hay otro modo
para estas vacaciones:
vámonos, Holmes, el infinito espera.
- En la misma edición de Cátedra aparecen los siguientes versos, pertenecientes, supuestamente, a una poetisa gibraltareña:
La casa era un sinfín de cosas viejas,
un desorden de libros, trastos, mapas:
El hombre, un carcamal, que en dos etapas,
nos dijo buenos días. Cuatro abejas le rondaban del labio a las orejas;
la mano en un pipa de esas guapas,
y la otra sobre un tomo con las tapas
roídas. Lentamente alzó sus cejas
y sonrió: — ¡ Lestrade! —dijo a mi abuelo—.
La belleza es verdad, nos entretiene
la vida. Y me miró
— Fue solo un vuelo..
y observando a esta niña ahora me viene...
—dijo, y pasó sus manos por mi pelo—:
Sí... era muy bella, y se llamaba Irene...
[editar] Sherlock Holmes en la radio
En Estados Unidos se emitió una serie radiofónica sobre Sherlock Holmes llamada The New Adventures of Sherlock Holmes (Las nuevas aventuras de Sherlock Holmes) que duró cientos de episodios. Se emitió desde el 2 de octubre de 1939 al 7 de julio de 1944.
[editar] Referencias
- ↑ a b Víctor Manteca Valdelande (8 de abril de 2010). «Sherlock Holmes anotado». La Opinión Coruña. Consultado el 4 de septiembre de 2010.
- ↑ The Strand Magazine publicaba las aventuras de Holmes a precios muy accesibles, y muchos «lectores comunales» de diversas industrias leían las obras de Doyle en voz alta como una suerte de «radio» victoriana, práctica ya habitual con la obra de Charles Dickens.
- ↑ En un principio, Doyle consideró llamar Sherrinford Holmes a su detective, pero William S. Baring-Gould, eminente biógrafo del personaje, intentaría hacer creer más tarde que tal era el nombre del hermano primogénito de Sherlock. En realidad fue algo que se inventó para evitar que ni Mycroft ni Sherlock tuvieran que heredar el cuidado de la mansión de su padre.
- ↑ Doyle, Arthur Conan (mayo de 1999). «La ciencia de la deducción.» (tapa dura). Estudio en escarlata.. trad. Lázaro Ros, A. (12ª edición). Madrid: Grupo Anaya. p. 23. ISBN 84-207-3803-4.
- ↑ Doyle, Arthur Conan (mayo de 2001). «Escándalo en Bohemia». Las aventuras de Sherlock Holmes. trad. Juan Manuel Ibeas (1ª edición). Madrid: Grupo Anaya. p. 39. ISBN 84-667-0569-4.
- ↑ Doyle, Arthur Conan (1998). «XVII. The Adventure of the "Gloria Scott"» (en inglés). The Original Ilustrated "Strand" Sherlock Holmes. The Complete Facsimile (8ª edición). Hertfordshire: Wordworth Editions Limited. p. 344. ISBN 1-85326-896-8.
- ↑ Doyle, Arthur Conan (mayo de 1999). «La ciencia de la deducción.» (tapa dura). Estudio en escarlata.. trad. Lázaro Ros, A. (12ª edición). Madrid: Grupo Anaya. pp. 25. ISBN 84-207-3803-4.
- ↑ Doyle, Arthur Conan (mayo de 1999). «La ciencia de la deducción.» (tapa dura). Estudio en escarlata.. trad. Lázaro Ros, A. (12ª edición). Madrid: Grupo Anaya. pp. 26–27. ISBN 84-207-3803-4.
- ↑ Kyle Freeman, ed (2003) (en inglés). The Complete Sherlock Holmes, Volumen 1. Spark Educational Publishing. ISBN 1593080344.
- ↑ «Ristra de rastros holmesianos», artículo de Jesús Cuadrado para The Stranded nº11, 1998
- ↑ Vanessa Thorpe (18 de Julio de 2010). «Sherlock Holmes is back… sending texts and using nicotine patches» (en inglés). guardian.co.uk. The Guardian. Consultado el 1 de septiembre de 2010.
- ↑ BBC (12 de Julio de 2010). «Other detectives have cases, Sherlock has adventures» (en inglés). Nota de prensa. Consultado el 1 de septiembre de 2010.
- ↑ http://www.snopes.com/quotes/signature/elementary.asp
- ↑ Doyle, Arthur Conan. «El sabueso de los Baskerville», The Original Ilustrated "Strand" Sherlock Holmes. The Complete Facsimile. p.450
[editar] Enlaces externos
[editar] En español